Por: Diego Lanese

En la mayoría de los estudios sobre el impacto de la inflación en los sueldos, los estatales nacionales son los más perjudicados. La última paritaria, por ejemplo, se firmó con aumentos por debajo de la suba general de precios, profundizando la caída de los ingresos de los agentes públicos.

 

Con datos actualizados, la comisión interna de ATE-INDEC le puso números al desplome y alertó que desde fines de 2015 a la fecha, la baja de los ingresos supera los diez salarios, es decir, unos 250 mil pesos promedio.

 

Cuando en diciembre Mauricio Macri deje la Presidencia, esta brecha habrá subido a los doce sueldos, por lo cual en cuatro años, los estatales habrán trabajado uno gratis. Según los autores del informe, las perspectivas de pérdida salarial no cambiarán “a mediano y largo plazo”.

 

El informe de ATE-INDEC analizó la pérdida del salario real de estatales de la categoría D0, con un salario bruto de 25.750 pesos.

 

A septiembre de este año, “la pérdida acumulada con relación al poder adquisitivo de noviembre de 2015 alcanzó los 250.905 pesos, considerando incluso todas las sumas fijas otorgadas por única vez”.

 

Según el trabajo, al que tuvo acceso Política del Sur, “estos 250.905 pesos son casi casi diez meses del salario actual de la D0, y serían, apenas, el monto necesario para recuperar el poder de compra de quienes están en la categoría”.

 

Además, señala que “sólo durante el último año (septiembre 2018-septiembre 2019), la pérdida acumulada para una categoría D0 es de 116.352 pesos (9.696 pesos por mes), y la variación interanual del salario normal de septiembre de 2019 marca una caída del 14,5 por ciento en términos reales”.

 

Respecto del ejercicio sobre pérdida salarial en todo el período Cambiemos, “desde diciembre de 2015 hasta septiembre de este año, último dato disponible, los trabajadores del INDEC registraron que los empleados públicos perdieron un 31,2 por ciento del poder adquisitivo”.

 

Ante este escenario dramático, las perspectivas de que mejore en el corto plazo no parecen ser las mejores. Según adelanta Raúl Llaneza, titular de la comisión interna de ATE-INDEC, para diciembre “la caída será de doce salarios, es decir, un año de los cuatro trabajadores en la era Macri se perdieron”.

 

El desplome, uno de los peores de todos los sectores (incluido el privado), será el eje de la relación con el futuro gobierno, ya que con la actual gestión “no hay mucha esperanza”.

 

“Es difícil recuperar esta magnitud de lo perdido con este gobierno, que se está yendo y está cada vez más debilitado”, sostuvo Llaneza, en diálogo con Política del Sur.

 

Con respecto a lo que pueda pasar con Alberto Fernández en la Presidencia, Llaneza remarcó que buscarán la recuperación, pero no son muy optimistas. “Frente a este pacto que se plantea entre empresarios y gremios, no va a caber ninguna recomposición salarial, la mirada a corto y mediano plazo es seguir perdiendo”, se lamentó.

 

Además de la pérdida salarial, los estatales quieren recuperar los puestos laborales perdidos. “En medio de la crisis perdimos 125 mil puestos de trabajo en todo el país, catorce por hora sólo en el último año”, destacó Llaneza.

 

En el Estado, ATE sostiene que en el macrismo hubo al menos 35 mil despidos en las dependencias nacionales. Así lo determinó la Comisión de Relevamiento y Reincorporación de los Trabajadores y Trabajadoras Estatales Despedidos en la era Macri (Corredma), un espacio creado a fines de julio de este año que busca mantener en alza las peleas que se llevan adelante en la mayoría de los organismos donde se produjeron despidos masivos. Desde su creación, se estableció como prioridad recuperar esos puestos de trabajo perdidos.