Por: Por Ruben Molina

La decisión del intendente de Lomas de Zamora, Martín Insaurralde, de enviar al Concejo Deliberante un proyecto de creación de tres tasas nuevas generó gran sorpresa en la comunidad política local, no sólo por la cantidad, sino por las características de las mismas. El jefe comunal decidió alambrar su distrito y todo aquel que quiera cargar nafta deberá pagar 40 centavos más que el resto de los municipios, y para cargar gas, la diferencia será de 15 centavos. Además, y a manera de prueba piloto, cobrará 100 pesos a todo ciudadano que pertenezca a otra comuna y pretenda atenderse en el Hospital de Llavallol. La frutilla del postre es el 0,5 por ciento extra que se cobrará a los vehículos que se registren o transfieran en Lomas.

La iniciativa será avalada dentro de pocos días, luego de que el Concejo Deliberante y la Asamblea de Grandes Contribuyentes -que controla el oficialismo- lo apruebe. La iniciativa cuenta con el aditamento de un incremento de la tasa municipal cercana al 35 por ciento. Sin dudas, el porcentaje es de los más bajos en la región, pero la sorpresa viene por el lado de las "ingeniosas" tasas creadas por Insaurralde.

La reacción "impositiva" del Intendente tiene sus motivos: la Provincia les metió presión a los municipios, en especial a los del Conurbano. El año próximo, de ser aprobado el Presupuesto Provincial, deberán hacerse cargo de gran parte del gasto social, los subsidios del transporte público local y, como si fuera poco, el dinero enviado desde La Plata por el Fondo Educativo deberá ser destinado íntegramente a infraestructura. Luego de la tragedia en la escuela de Moreno, se acabaron los planes y programas especiales educativos de los jefes comunales. Forma parte del ajuste y condiciones presupuestarias que la Provincia trasladará a los municipios.

Insaurralde no fue el único forzado a meter mano en el presupuesto y trasladar la presión bonaerense a los contribuyentes. En Avellaneda el incremento será del 50 por ciento, en Lanús rondará el 40 y algo similar ocurrirá en el resto de los distritos de la región. Pero, sin dudas, lo del lomense fue un poco más allá. Dispuesto a bancarse los costos, pero no la pérdida de caja, el alcalde avanza con todo en su objetivo, y eso incluye poner en juego su propio capital político.

Acostumbrado a no dar explicaciones públicas de su gestión, Insaurralde redobla la presión sobre los lomenses y los no lomenses. Pasar con vehículo propio por Lomas de Zamora es una verdadera travesía. Si no te atrapa una fotomulta (la mayoría mal señalizada y de dudosa rigurosidad), lo hace alguna indiscreta camioneta o agente de tránsito. Insaurralde no habla con la prensa local, sólo lo hace a veces a través de imprevistas ruedas de prensa y ante la intensa acción de los "pisa cables" adictos a su gestión. Insaurralde habla con Marcelo Tinelli, Alejandro Fantino o algún periodista nacional que le pregunta sobre cuestiones nacionales o banales. A los trabajadores de prensa local nos ningunea.

A esta altura nadie duda de que el mandamás de Lomas irá por un nuevo período al frente de la comuna. La aventura de la gobernación quedará para otra oportunidad. Ahora lo importante es retener el distrito y para eso necesita no perder ingresos. En la búsqueda de ese objetivo, no escatima en esfuerzos. La duda es: lo que entra por un lado en materia de dinero, ¿no saldrá por otro a través de la pérdida de votos? El jefe municipal cree, y en su entorno lo ratifican, que les sobra espalda y votos para mantener la conducción del municipio.

Un encuentro realizado la semana pasada en la Universidad Nacional de Lomas de Zamora brindó, tal vez, la fotografía de lo que se viene para el peronismo en la provincia. Dispuesto a ponerse por arriba de cualquier candidatura y en un rol claramente de armador de la unidad partidaria, entendiendo a esta como única herramienta para desbancar a Cambiemos. La imagen del encuentro lo mostró consolidado en ese propósito.

La presencia de Verónica Magario, la intendenta de La Matanza, la posiciona como "la" candidata. ¿Quién será su compañero de fórmula? No pocos creen que alguno de los que estuvieron sentados en el cierre del acto en la universidad podría ser una buena compañía para la matancera. Siempre y cuando cuente con el aval de Martín.

El otro dato -no menor- es el rol del rector de la UNLZ, Diego Molea. No sólo puso a disposición del justicialismo bonaerense la universidad, sino su propia facultad, la de Derecho. Próximo a asumir como miembro nacional del Consejo de la Magistratura, a esta altura Molea no sólo puso la estructura universitaria para la causa peronista, sino también el cuerpo. Alejado de sus tiempos juveniles reformistas en la Franja Morada, el kirchnerismo de Néstor y el Frente Renovador de Sergio Massa, el actual rector pretende mayor protagonismo político. Tal vez esta sea su oportunidad de la mano de su reconciliada amistad con Martín.

En este contexto es que Insaurralde avanzó en la creación de estas nuevas tasas, algo que no solamente sorprendió a la comunidad en general, sino a la propia oposición. A esta altura, en Cambiemos dudan en apoyar o no la creación. La semana pasada, cuando la iniciativa fue presentada, votaron divididos. El concejal de la Coalición Cívica Jorge Villalba adelantó su rechazo. El resto del bloque se abstuvo aduciendo que no tuvieron tiempo de analizarlo. Desde el Frente Renovador también se le dijo "no".

En los próximos días habrá novedades del lado de Cambiemos, aunque aseguran que no rechazarán el presupuesto. Eso sí, adelantaron que el tema del aumento extra en el combustible lo están analizando. No descartan una presentación en la Justicia por considerarlo inconstitucional. El tema puede traer cola. Con respecto al "impuesto a la salud", lo miran con simpatía, aunque advirtieron que si a Horacio Rodríguez Larreta se le ocurriera hacer algo parecido en la Ciudad de Buenos Aires, sin dudas sería un escándalo.

La polémica recién empieza. El oficialismo local se escuda en la presión que le meten tanto Nación como Provincia y apuntan, cual credo religioso, contra Mauricio Macri y María Eugenia Vidal como los grandes responsables de la drástica decisión de Insaurralde, obviando que los proyectos elaborados por su "jefe" superarían, de aprobarse, hasta los del propio Presidente de la Nación que tanto critican.

¿Los vecinos de Lomas de Zamora deberán cargar combustible en otro municipio? ¿Si sos de otro municipio y tuviste un accidente deberás atenderte en otro lugar que no sea suelo lomense, a riesgo de morir en el intento? ¿Una extraña forma de discriminar? ¿Definitivamente, Insaurralde va por los votos de la clase baja, dejando de lado los de la golpeada clase media? Son apenas algunas de las preguntas que se podría hacer, aunque habría que sumar una más: ¿En qué te has convertido, Martín?