Una mujer que acusó por abuso sexual a su ex pareja y padre de su hija, quien habría sido la víctima de los terribles hechos ocurridos en Villa Fiorito cuando tenía entre 3 a 5 años, y fueron descritos por la menor, habló en exclusiva con el programa radial Política del Sur, sobre la causa, que fue denunciada en 2015, pero que todavía no tiene fecha de juicio.
"Los chicos no mienten, como puede relatar una criatura de 5 años, algo que no vivió", expresó Verónica Figueroa, sobre la declaración en Cámara Gesell de la menor, que ahora tiene 15, y quiere volver a hablar para contar la pesadilla que vivió en manos de su progenitor, cuando se quedaba en la casa de él.
Mientras tanto, el acusado está libre, a la espera de ser juzgado por los aberrantes hechos que se le imputan, a pesar de que las pericias habrían arrojado resultado positivo, y de un pedido de Sebastián Bisquert, fiscal a cargo de la causa, que había solicitado su detención.
"Él está libre y viola la restricción perimetral todo el tiempo", explicó Verónica, que teme dejar sola a su hija, ante el riesgo latente de que se pueda cruzar con el sujeto denunciado, que trabaja como verdulero. Además, aseguró que sufrió todo tipo de agresiones para que retirara la acusación, e incluso tuvieron que mudarse al partido de la Matanza, luego de una breve estadía en el Hogar Fátima Catán.
La causa está caratulada como "abuso sexual con acceso carnal agravado por el vínculo reiterado en concurso real con acceso carnal agravado por la convivencia preexistente, por encontrarse el imputado al cuidado de la víctima y por configurar su modo de realización y duración, un sometimiento gravemente ultrajante para la víctima".
A raíz de los hostigamientos que sufrió la denunciante, pidió una medida cautelar, que le fue otorgada, pero esta sería violada desde que su agresor se enteró de que volvieron a vivir a Fiorito.