jueves 31 de octubre de 2024 - Edición Nº2157

Club Lanús | 18 abr 2024

FALLÓ EN LOS MOMENTOS CLAVE

El fracaso de Lanús en la Copa de la Liga

El Granate no pudo clasificar a los cuartos de final, se quedó eliminado tras un sprint final en el cual sacó 1 punto sobre 9 y se quedó sin la posibilidad de meterse entre los mejores ocho. Estuvo entre los cuatro primeros la mayor parte del torneo y no supo manejar esa ventaja.


Lanús no tuvo el cierre esperado en la fase regular de la Copa de la Liga Profesional y debió decirle adiós al principal objetivo muy rápidamente. Si bien el equipo dirigido por Ricardo Zielinski había sido diseñado para salvarse del descenso, las eliminaciones tempranas en la Copa Argentina a manos de El Porvenir y la reciente de la Copa de la Liga ante Estudiantes de La Plata y como local en La Fortaleza, explican un poco que al equipo le faltó jerarquía en los momentos claves.

Primero la eliminación ante El Porvenir en Florencio Varela y ahora quedarse afuera en su estadio. Hace tres fechas, luego de ganarle a Belgrano en Córdoba, el Granate era líder de su grupo. Sin embargo, sólo sumó uno de los últimos nueve puntos en disputa y no logró el pasaje a los play-off donde se definirá el titulo.

Lanús no pudo ganarle a Unión como local, donde cosechó sólo un empate por 2 a 2 y cayó 2 a 0 ante Racing en Avellaneda casi sellando su suerte en esta Copa de la Liga. Un equipo que se fue desinflando con el correr de las fechas en la recta final del torneo.

“Vine a Lanús porque soy de barrio y sentí que necesitaba una mano. Estamos peleando por eso, no debemos confundirnos. Tenía un objetivo muy claro que era sacarlo de una situación muy comprometida en la que estaba”, aseguró el entrenador Ricardo Zielinski, quien llegó al granate con la idea de salvarlo del descenso. Primer objetivo cumplido, aunque cuando tuvo que dar el salto de calidad quedó en deuda.

“En esta Copa de la Liga estuvimos siempre dentro de los primeros cuatro, hicimos meritos para clasificar pero no pudimos. Tuvimos un bajón en el momento que no era el ideal. Pero yo felicito a los jugadores, han dejado una buena sensación, los detalles hoy nos juegan en contra. Hemos sido competitivos en todas las líneas. Más no se puede decir. La pelota no entro y ellos tuvieron la suerte que nosotros no”, explicó el “ruso”.

Lo concreto es que Lanús dejó pasar varias chances para asegurar la clasificación. Generalmente falló en su estadio, donde no gana desde el 18 de febrero cuando se impuso sobre Boca por 2 a 1. Luego le empataron en el descuento en el clásico ante Banfield, en un partido increíble. Ese gol de Milton Giménez sobre el final todavía se sigue lamentando por los pasillos de La Fortaleza. También perdió ante Central Córdoba de Santiago del Estero, uno de los equipos más flojos del campeonato.

Da la sensación que el Granate nunca pudo ser protagonista cuando la situación lo ameritaba. A Estudiantes le ganaba por 1 a 0 con un gol tempranero de Ezequiel Muñoz y no supo liquidar el partido. Luego, Eduardo Domínguez le ganó el duelo táctico a Zielinski. Es verdad, la expulsión de Raul Loaiza terminó siendo clave para el desarrollo, pero los goles de Guido Carrillo fueron determinantes para concretar el fracaso.

Ahora  a Lanús le queda ser protagonista en la Copa Sudamericana, en un grupo donde marcha con puntaje ideal. El Granate debe salir primero con rivales con Cuiabá de Brasil, Metropolitanos de Venezuela y Deportivo Garcilaso de Perú. A su vez, debe seguir sumando para engrosar el promedio en el próximo torneo de la Liga Profesional.

En cuanto al entrenador, la idea de la dirigencia es que cumpla el contrato hasta fin de año. Todos son conscientes de que Zielinski llegó para sacar al equipo de la zona del descenso, pero los reproches de la gente se pueden llegar a dar si es que el Granate no logra acceder a la próxima fase en la Copa Sudamericana. Será importante como siga el camino en las próximas competencias. Desde los números, está entre los 10 primeros de la tabla general y arriba de siete equipos en los promedios del descenso, cuando había comenzado 26 de 28 equipos. Positivo desde los números para el objetivo principal, pero en el debe a la hora de dar el salto de calidad y para volver a instalarse en la lucha grande en el fútbol argentino.

 

 

 

 

 

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