La concejal de la Unión Cívica Radical (UCR) de Lanús, Ayelén Curlo, aseguró que el 24 de marzo es una fecha “que interpela a todos los argentinos sin distinción de partidos e ideología”, al tiempo que cruzó a la vicepresidenta, Victoria Villarruel, al afirmar que no se trata de “un festejo morboso” o un “relato de izquierda”, sino una jornada que servirá para “reflexionar sobre los errores del pasado para no repetirlos”.

“No es una fecha más. Representa un día que nos interpela a todos los argentinos sin distinción de partidos e ideología. Ese día de 1976 se arruinó para siempre a la Argentina, es verdad. Y por eso no creemos que esto debe quedar en una efeméride y nada más. Debe ser una fecha que nos invite a reflexionar sobre los errores del pasado para no repetirlos”, insistió la edil de la oposición en contacto con Política del Sur.

Al mismo tiempo, ratificó que este 24 de marzo se desarrolla en un contexto especial por el incremento de los discursos negacionistas. “Es un homenaje a quienes fueron padres, madres, hijos y nietos desaparecidos. Más que incitar a la discrepancia, tenemos que encontrarnos todos juntos valorando y apreciando cada vez más que hoy podamos gozar de una democracia plena que reivindica la bandera de los derechos humanos”, completó.

Inundaciones

En la última sesión ordinaria que se desarrolló en el Concejo Deliberante, se aprobaron proyectos para aliviar la situación que atraviesan los vecinos por las inundaciones que se produjeron a raíz de las fuertes tormentas de las últimas dos semanas.

Curlo valoró el trabajo del Cuerpo aunque aclaró que “hay mucho por hacer”. “Muchos vecinos y sus familias resultaron afectados por el temporal. Las medidas tomadas son necesarias y urgentes como la eximición de las tasas para los comerciantes o el más que necesario reclamo de un pedido de informe y una multa a Edesur. Se trata de acompañar a los vecinos y brindar soluciones”, indicó.

"Encrucijada" en la UCR

Por último, consultada por la actualidad partidaria que atraviesa el radicalismo a nivel nacional, con muestras claras de distanciamiento entre los principales referentes en torno al tratamiento del mega DNU, la concejal admitió que existen dos posturas antagónicas bien marcadas.

“Hoy el radicalismo atraviesa una encrucijada entre los que quieren aceptar el rol de opositores racionales, es decir, que sepan interpretar lo que puede ser positivo para los argentinos, y los que solo quieren bajo el argumento de ser dialoguistas, aprobar todo a mano alzada ciegamente”, sentenció.