Choferes de varias líneas de colectivos de la región también se plegaron a la protesta por anomalías en el proceso electoral de la Unión Tranviarios Automotor (UTA). La polémica estalló luego de que la Junta Electoral del gremio de los colectiveros diera de baja la lista encabezada por Miguel Bustinduy, exintegrante de la conducción nacional, que buscaba arrebatarle el poder e Roberto Fernández.

Los comicios, a pesar de los reclamos, se llevaron a cabo el mes pasado y resultaron en una nueva reelección de Roberto Fernández. Desde el sector opositor se llamaron a la protesta y se consideraron "proscriptos" por la conducción del sindicato. En ese marco, al menos 20 líneas de colectivos de la compañía DOTA se plegaron durante la jornada de ayer a un paro sorpresivo y dejaron sin servicio a los pasajeros de la Ciudad de Buenos Aires y el Conurbano.

Los conductores alinearon los colectivos sobre las avenidas 9 de Julio y Lavalle para reclamar el llamado a elecciones en la UTA y mejoras en el servicio, en medio de un reclamo gremial. La medida de fuerza se extenderá hasta las 18 y afecta a las líneas 28, 101, 44, 57, 168, 132, 21, 161, 7, 117, 60, 108, 56, 5, 8, 23, 76, 135, 6 y 80.

La región también tuvo lo suyo. Leandro Fernández, delegado gremial de la empresa 165 expresó su malestar por la situación. En diálogo con el programa radial Política del Sur, resaltó: "Estamos con problemas internos en el sindicato, había elecciones y hubo tres listas impugnadas. Estamos yendo al Juzgado para demostrar que no estamos de acuerdo con la conducción de Roberto Fernández."

De todas formas, aclaró que la línea 165 estaba activa y en principio no había ninguna medida de fuerza prevista para los próximos días. "Por ahora no hay ningún corte de servicio; quizás pasen con menos frecuencia, pero cortes no van a haber", concluyó.