El abuso sexual en la infancia es una de las cuestiones que más cuesta visibilizar y confrontar hoy en día, pero es una realidad lamentable que atraviesan muchos hogares y que deja graves heridas abiertas de por vida en los niños, niñas y adolescentes.

Este lunes, diversos colectivos feministas, de derechos humanos, sociales y políticos autoconvocados por el grupo de Facebook “Justicia para Ivi y su Hija”, se reunieron temprano por la mañana para acompañar en una jornada artística de resistencia a Ivana y su nena ante el juicio oral de su progenitor, Gabriel Orlando Sosa, quien fue encontrado responsable penalmente por abuso sexual agravado (causa IPP 042495-15).

En comunicación con Política del Sur, Ivana manifestó ayer que en el 2015 realizó “la denuncia en el Juzgado de Lomas de Zamora”, sola y sin un abogado, porque no podía pagarlo. Y especificó: “Recién el lunes pasado fue el juicio oral contra el progenitor, abusador sexual, y estamos esperando al lunes que viene, donde se hará la otra parte de la audiencia, para que realicen los alegatos y saber qué fallos van a tener los jueces.”

“La jornada del lunes fue muy fuerte”, sostuvo, y criticó la manera en la que “revictimizan a las madres” que hacen las denuncias a los violadores y abusadores, y remarcó: “Y a les niñes también”. Sin embargo, destacó que “por suerte hubo un buen desarrollo” por parte de los fiscales Silvina Estévez y Héctor, y de los jueces. Espero que así sigan y que el fallo sea bueno para también poder demostrar que estamos luchando contra esto y que no es algo menor”.

“El abuso sexual infantil hoy en la Argentina está muy invisibilizado, incluso por parte de la Justicia, que lleva a que hagan pocas denuncias, porque es complicado además manejarse sin un abogado penalista, que es muy difícil de pagar. También, por toda la violencia que sufrimos las mujeres”, determinó.

Y continuó: “En el juicio, lo que menos hicieron fue defenderlo, pero lo que más hicieron fue putearme a mí, porque, si bien es indefendible el abuso sexual, nos culpan a las madres, incluso hasta el abogado de la defensa se atrevió a nombrar el ‘Síndrome de Alienación Parental’ (SAP), que es una atrocidad de teoría que desarrolló un pedófilo confeso, Richard Gardner, que está desaprobada por psicólogos y la Organización Mundial de la Salud (OMS). Es terrible que lo utilicen”, criticó.

En este sentido, destacó que por eso mismo las mujeres y familiares de víctimas de abuso sexual infantil tienen que “luchar todos y todas contra esto, porque es muy atroz que quieran hacerlo pasar como un delito menor, que lo naturalicen”.

También remarcó las polémicas declaraciones del senador salteño del PJ Rodolfo Urtubey, quien en el debate por la legalización del aborto del miércoles, apuntando a los casos de violencia intrafamiliar, señaló que “hay algunos casos en los que la violación no tiene” una “configuración clásica de la violencia sobre la mujer, sino que a veces es un acto no voluntario con una persona que tiene una inferioridad absoluta de poder frente al abusador".

En este sentido, criticó que “dichos terribles como que las violaciones intrafamiliares no eran violentas” sólo “defienden los abusos sexuales en la infancia”, y afirmó que “el 80 por ciento de los abusos infantiles se dan en el ámbito intrafamiliar y el 50 por ciento son los progenitores, el resto son personas allegadas a la familia”.

Y determinó: “No podemos seguir tolerando eso y no podemos seguir guardando silencio, por eso es tan importante seguir con esta lucha, visibilizando en este momento mi causa, pero que es algo que yo lo llevo adelante no sólo por mi hija y por mí, sino por todas las niñas, niños y adolescentes que en este momento están siendo abusados y revictimizados todo el tiempo. Tenemos que salir a levantar la voz por ellos”, aseveró.

Ivana señaló que los episodios de abuso ocurrieron cuando ya se encontraban “separados” y que su hija lo manifestó a través de la Cámara Gesell, de la cual criticó: “Es muy importante que se respete su voz, porque muchas veces incluso no lo hacen, las desestiman y las quieren volver a hacer.”

El lunes que viene se realizará la próxima audiencia para que brinden el alegato, y más adelante los jueces dictaminarán si el fallo es favorable. “Muchas veces, las madres, abogados y profesionales que luchan contra el abuso sexual en la infancia me han dicho que tengo mucha suerte por la rapidez en el proceso”, reflexionó, y agregó: “Nuestro proceso duró tres años, hay otros que duran cinco, seis, nueve años o que siguen archivados porque prescriben las denuncias. Es una cuestión que hay que visibilizarla mucho más.”

“Es importante que la gente pueda hablar y romper el silencio. Hay formas de luchar contra esto y de denunciar, porque también creo que tenemos que reclamar como sociedad que los abusadores sexuales tengan cadena perpetua. Es una vergüenza que tengan tan pocos años. No tienen una cura, no se reivindica, siempre lo van a volver a hacer porque son perversos terribles. Hay que reclamar que cambien las formas de la Justicia”, concluyó.