De cara a la vuelta rápida a la elite del fútbol argentino, Arsenal de Sarandí regresó a las prácticas con varias novedades y la presencia de muchos juveniles, que terminaron jugando en Primera División antes de consumarse el descenso. Con Sergio Rondina al frente del plantel y todo su cuerpo técnico, el equipo del Viaducto ya trabaja de cara a la venidera Primera B Nacional.

Si bien un hombre de la casa como “El Huevo” Rondina es el entrenador de Arsenal, quien se sumó como manager deportivo del club es Pulciano Aquino, una gloria del equipo de Sarandí. Aquino fue el autor del penal decisivo que le dio el ascenso en 1992 cuando Arsenal subió a la Primera B Nacional hace 32 años, venciendo en los viejos interzonales a Alvarado de Mar del Plata, siendo también ayudante de campo del recordado Roberto “Vasco” Iturrieta y de Jorge Luis Burruchaga, cuando el conjunto del Viaducto subió a Primera División en 2002.

Otra de las principales novedades en la vuelta al trabajo de Arsenal es la presencia del primer refuerzo confirmado: el defensor Aníbal Leguizamón Espínola, quien con 26 años, regresa a Sarandí tras quedar libre en tercera división hace algunos años, luego de pasar por Argentino de Quilmes y llegar procedente de Defensores de Belgrano de Villa Ramallo, equipo con el que llegó hasta la final por el ascenso en el Federal A tras perder con Gimnasia y Esgrima de Mendoza. Además, Leguizamón Espínola es sobrino de los hermanos Darío y Oscar: “Junior” y “Cafú” son también dos referentes de la vida deportiva del club, al ocupar actualmente puestos como técnicos en la Reserva y las divisiones inferiores del club.

Quienes continúan del plantel anterior y se presentaron a los entrenamientos de Arsenal fueron: Federico Milo, David Drocco, Matías García, Rodrigo Pollero, Alejo Antilef, Sebastián Lomónaco, Mauricio Aquino, Facundo Quintana, Germán Ferreyra y algunos juveniles como Gonzalo Gómez, Lucas Necul, Mateo Carabajal, entre otros. En materia de refuerzos, Arsenal de Sarandí se encuentra en la búsqueda de un arquero y dos defensores de experiencia para la categoría.

Si bien el éxodo de desvinculaciones es amplio, los últimos en rescindir contrato fueron el volante uruguayo Gonzalo González y el lateral Claudio Corvalán, último capitán del equipo que podría continuar su carrera en Unión de Santa Fe. Además, se está negociando el traspaso del defensor Marcos Curado a un equipo de la Serie B de Italia y aún no se sabe a ciencia cierta si continuará el atacante charrúa Diego Cháves, quien posee una oferta del exterior.