Lautaro Maldonado se ha consolidado como una pieza fundamental en la reciente hazaña de Ferrocarril Midland, el equipo que logró el ascenso a la Primera Nacional tras una temporada memorable. El joven arquero argentino, nacido el 5 de diciembre de 2001 en Adrogué, ha demostrado ser una de las figuras más destacadas del fútbol de ascenso. 

En su paso por el club de Libertad, al que se unió a principios de 2025, Maldonado se convirtió en el jugador de asistencia perfecta de Midland. Disputó un total de 40 compromisos entre el Torneo Apertura y el Clausura de la Primera B, jugando la totalidad de los minutos en cada uno de ellos. Su rendimiento fue clave para el logro del equipo, ya que ostentó la distinción de tener la valla menos vencida de la temporada, recibiendo tan solo 15 goles en esos 40 partidos.

Lautaro ya había demostrado su gran valía también en su experiencia previa en San Martin de Burzaco donde fue vital para que el equipo de Burzaco mantenga la categoría en la primera B Metropolitana y fue una de las figuras en lo que fue el histórico partido de Copa Argentina del elenco sureño ante Racing, donde entre otras cosas, le detuvo un penal a "Maravilla" Martinez.

Lo sorprendente de esta historia es que una vez culminada esta campaña en el Azul de Burzaco, el arquero de aquel momento 23 años, debía volver a Temperley para reincorporarse a los entrenamientos, sin embargo el club, contrario a lo que la mayoría de la gente consideraba, con su nueva CD y Consejo de fútbol, tomaron la decisión de no renovar el contrato del Juvenil, dandole la carta de libertad. Para Temperley con el diario del Lunes, una decisión fatal, no solo por la gran perdida económica que significa para el club perder la posibilidad de vender a quien se convirtió en el mejor arquero de la B Metropolitana y uno de los mejores de todo el ascenso, si no que además Temperley no tuvo arquero de relevo para Ezequiel Mastrolia durante toda la temporada, obligándolo a hacer debutar un juvenil en un partido clave contra Estudiantes de Caseros en el ocaso del campeonato. 

 

 

 

 

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Sin ir más lejos, Maldonado a mediados de temporada en diálogo con Todo X Temperley destacó que cuando quiso volver a principios de este curso, llamo a Crivelli y a parte de la Subcomisión de fútbol pero ni siquiera le atendieron el teléfono. "El año pasado era el ultimo contrato que me quedaba y cuando se dio la oportunidad de ir a San Martin, el club lo aceptó, y yo pensé que se iba a extender el contrato un año mas pero no fue así. Yo en San Martin traté de aprovechar la oportunidad de mostrarme cosa que no me paso en el club, por suerte pude sumar muchos partidos", y agrego."Mi prioridad siempre la tuvo Temperley, queria volver pero eran tiempos bastantes movidos por el tema de las elecciones, cuando se supo quienes iban a seguir, yo hable con la gente que manejan el futbol del club, le di la prioridad al club. Hable con Jorge (Colas) y él me dijo que no sabia que iba a pasar. Pero no podía dejar pasar el tiempo porque las ofertas que me llegaban, si yo no daban respuesta las ofertas iban a pasar de largo. También Hablé con Fede (Crivelli) y no me contestó. Tuve que decidir por Midland. Hoy estoy muy contento con la decisión que tome".

Con casi 24 años de edad, 1,92 m de altura y una gran proyección, Lautaro Maldonado no solo ha sido un pilar en el ascenso de Ferrocarril Midland, sino que se perfila como una de las promesas bajo los tres palos del fútbol argentino. Y parece tener su destino bien marcado a la primera división del fútbol argentino, parece un hecho que vestira la próxima temporada, la camiseta de Instituto de Córdoba.