Luego de meses de lucha y reclamos, los trabajadores del hospital pediátrico Dr. Juan Pedro Garrahan consiguieron un importante aumento salarial del 61%, que también incluye bonos mensuales, pero crecieron las denuncias de persecución sindical. Política del Sur conversó al respecto con Alejandro Lipcovich, trabajador del Hospital Garrahan y secretario general de la Junta Interna de ATE Garrahan.
“Hubo un cambio enorme, obtuvimos una conquista que es histórica porque en el país de las paritarias al 1%, en el Garrahan nos acaban de otorgar y ya cobramos el 61% del aumento al básico. Cobramos la primera parte, lo que faltaba para completar octubre. Y es un triunfo histórico que se obtuvo con un método que para nosotros es muy claro, que fue contra el gobierno”, detalló Lipcovich.
Aseguró que “el Gobierno pretende jactarse de que en base a una gestión eficiente de los recursos públicos pudo dar este aumento, lo cual es a todas luces falso". "La historia concreta de los últimos seis meses demuestra que se resistieron todo lo que pudieron a satisfacer cualquier reclamo de los trabajadores. Este aumento es lo que plantea la propia ley de Emergencia Pediátrica, que el Gobierno votó en contra dos veces dentro del Congreso, luego votó en contra ante la insistencia y perdió. Y a pesar de vetar y que se derrotara ese veto, se sigue negando a cumplir la ley”, apuntó.
Destacó, para conseguir este aumento, “una lucha que tuvo seis meses de huelga, movilizaciones, de apoyo de la comunidad, festivales, acciones de visibilización". "Los trabajadores y trabajadoras del Garrahan no aflojamos en reclamar algo que era de interés propio y que nos merecíamos, una recomposición salarial frente a un derrumbe que no tenía antecedentes en el salario, pero que además era de interés general”, planteó.
En ese sentido afirmó que “si la cosa seguía así, el hospital se iba a vaciar a niveles intolerables, ya habían renunciado 300 trabajadores de distintos oficios y profesiones". "Y ese vaciamiento sigue siendo un problema. Tenemos reclamos muy significativos vinculados al ingreso de personal, al pase a planta de gente que está precaria y que si no la efectivizan es probable que quede afuera o que se vaya. Y el mensaje que nosotros transmitimos es que logramos lo que decían que no se podía lograr”, señaló.
Relacionado a esto, cuestionó que el embate contra la dirigencia sindical. “Nos llamaban a quedarnos tranquilos, aguantar lo que la gente supuestamente había votado. El Garrahan dijo ‘nos vamos a la lucha’ y obtuvimos algo que contrasta con la parálisis que nos plantea la CGT y demás. Como consecuencia de este triunfo es que el Gobierno ahora aplica una política revanchista y está con una persecución a quienes hemos estado al frente como representantes sindicales, pero también a trabajadores y trabajadoras de la base”, precisó.
Lipcovich contó que el gobierno inició 45 sumarios contra los trabajadores del hospital. “Es un mecanismo para tratar de generar terror, aleccionar, plantear ‘nos derrotaron, pero ahora se termina y no va a haber más reclamos’. Es un ataque que vamos a enfrentar con la misma metodología con la cual conseguimos el aumento, que es uniéndonos adentro del hospital, buscando el apoyo hacia afuera”, manifestó.
“Este ataque justamente lo que busca es tratar de que se cierre para siempre la situación. Y hay un montón de problemas que hacen a nuestros derechos laborales y que hacen al derecho de atención de calidad de los niños y niñas de todo el país”, explicó el dirigente.
“Las autoridades nunca admitieron negociaciones alguna. Y ahora, como fueron vencidas y tuvieron que dar un aumento que no querían dar, tratan de generar las condiciones de una paz a los palazos. Pero vamos a hacer una asamblea para organizar las nuevas medidas y acciones de protesta porque no van a lograr disciplinar a un colectivo de trabajadores que tan masivamente se movilizó en defensa del hospital y de los trabajadores. Ni van a permitir que quienes estuvieron al frente de esa lucha sean castigados”, sostuvo.
Por último, adelantó que en la asamblea seguramente resolverán realizar un abrazo al hospital para la próxima semana. "Y nos empeñaremos mucho en que todo el apoyo social que tenemos y que sabemos que sigue existiendo, se manifieste de vuelta en las calles, en el Garrahan, para rechazar esta persecución. Para defender el derecho que los trabajadores tenemos a pelear por la salud pública, por los derechos de las infancias de este país y que no hay ningún gobierno ni autoridad que pueda prohibir por decreto esa protesta”, dijo.