

La falta de ventas y el aumento de precios de los insumos, ponen contra las cuerdas a las panaderías, especialmente en la periferia. Política del Sur conversó con Gabriel Ruiz, secretario general del Sindicato de Panaderos de Lanús, para conocer en detalle la situación que atraviesa el sector.
“En este último mes y pico se vio un parate, se han vendido una o dos docenas de facturas en todo el día. Pero esto no es de ahora solamente, pasa que la situación actual lo profundizó un poco más”, explicó Ruiz.
Además, cuestionó: “Yo escucho que habla cada personaje, que se les termina el discurso cuando le decís, presentame un 931 ¿Cuántos trabajadores tenés registrados? ¿En qué condiciones compran la harina? Y esos tipos no tienen ningún trabajador registrado, no saben de costos. ¿De dónde sacan ellos que una docena de facturas tiene que valer 20 lucas?”.
“Hace rato que la industria panadera viene siendo bastardeada por las políticas de los gobiernos municipales. Y no hay una dirigencia en la Cámara Empresaria que esté a la altura de las circunstancias”, lamentó.
Asimismo, Ruiz manifestó que “si bien mermó el consumo de facturas, es increíble la competencia desleal" del sector, no sólo a nivel local. “Vas a los kioscos y te venden todos los cuarteríos, los alfajorcitos de maicena, las pepitas, todo eso que se vendía en las panaderías. Ahora hay gente que lo hace en galpones cerrados, lo ponen en una bolsita y lo mandan a los kioscos. Eso también hace que la gente no vaya a la panadería”, denunció.
Por otro lado, comentó que en Lomas de Zamora, los panaderos regulan el precio del pan junto con la Municipalidad, motivo por el “la gente que viene de afuera del distrito y quiere vender pan o tiene alguna sucursal, tiene que vender acorde a lo que ellos le dicen”. “En Lanús hay lugares donde el kilo de pan está a $1.500. Y si el paradero sale a hablar, como los personajes estos, te dicen que el kilo de pan tiene que estar $3.500, cómo ellos mismos lo llevan a la sucursal a $1.400”, cuestionó.
Con respecto a la regulación, el dirigente remarcó que “pasa por las políticas de los municipios". "En Lanús es un desastre, en cualquier lado te venden pan: en una verdulería, en una pollería, en una carnicería. Te venden pan en todos lados y sin ningún control bromatológico, ningún control sanitario”, cuestionó.
“Las mejores panaderías que tienen el 90% de la gente registrada, que pagan los gastos fijos, tienen las facturas a $12.000 la docena y $3.000 el kilo el pan. Son las que mejor andan y las que más trabajadores tienen. Las panaderías que están cerca de los barrios bajos, son las que más están padeciendo porque ahí es donde entran pan de cualquier lado y no sabemos ni cómo lo hacen”, reflexionó. "No se expone el daño que le están haciendo a la industria del pan y a los trabajadores", apuntó.
En este marco, aseguró: "Más allá de este payaso que tenemos de Presidente (por Javier Milei) que ha agravado más la situación, si ordenamos y hacemos respetar, la industria del pan no puede estar mal, incluso bajamos los costos. La industria panadera es rentable, está mal administrada”.