Mientras se esperan duras sanciones de Conmebol por los graves incidentes entre hinchas de Independiente y Universidad de Chile, se conocieron detalles de la situación de las personas heridas y detenidas tras la barbarie que se vivió en el estadio Libertadores de América.

Actualmente, son cuatro los hinchas chilenos que siguen internados, uno de ellos de gravedad, por una fractura de cráneo que sufrió, producto de los golpes durante las agresiones de la parcialidad local. Todos ellos habían sido derivados junto al resto de los damnificados, a los hospitales Fiorito y Presidente Perón.

Fuentes judiciales informaron a Política del Sur que 111 hinchas del equipo visitante fueron detenidos por los delitos de "atentado y resistencia a la autoridad, lesiones, y lesiones graves y daños".

 

 

 

 

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Además, el fiscal Mariano Francisco Zitto, titular de la UFI 4 de Avellaneda, dispuso la detención de dos barrabravas de Independiente por agredir a la gente de U. de Chile que salían del estadio, mientras investigan lo ocurrido dentro del recinto deportivo, para identificar a los acusados de linchar a las víctimas.

Todo comenzó en la previa al partido del miércoles por la noche y la agresión escaló cuando los chilenos, ubicados en bandejas altas sin restricciones, arrojaron objetos hacia los hinchas argentinos.

Los hinchas locales accedieron a la tribuna visitante y golpearon brutalmente a los visitantes que seguían en el lugar. Después del caos, el partido se suspendió y en Conmebol figura como "cancelado".