

En mayo, la inflación fue del 1,5 por ciento y si bien restan algunos días para qie el dato oficial de junio (el Instituto Nacional de Estadística y Censos publicará el Índice de Precios al Consumidor el 14 de julio), desde la consultora LCG estiman un alza de precios del 2,6 por ciento. Los sectores que empujan la suba.
Florencia Iragui, economista que forma parte del equipo de la consultora LCG, explicó: “En la primera semana de julio, nuestro relevamiento nos dio una inflación del 0,7%", al tiempo que admitió una baja en mayo, pero que no se vio en junio ni julio. “Esta semana, las verduras tienen un poco de movimiento al alza, pero lo que más impactó fue panificados, que explicaron el 50% de la inflación porque subieron un 2,4%, según nuestro informe”, precisó.
Además señaló que las frutas y verduras -al ser estacionales- tienen variaciones de precio constantes, que se debe seguir de cerca para el análisis final de cada mes. “El último dato que tenemos del Indec es del 0,5% en lo que es alimentos, a nosotros nos había dado un poquito por debajo, pero en línea, y desde ahí fue creciendo. Ahora ya la inflación mensual nos está dando un 2,6%. Tampoco es que vemos una aceleración muy marcada, pero hubo una aceleración”, expresó Iragui.
En este marco, explicó que “al relevar supermercados tenemos promociones y esas cosas que pueden variar". "El semana a semana es algo muy fino, que no es lo hay que observar tanto como sí, el mensual. En el mensual por categoría, lo que más explica la inflación es carnes y bebidas”, agregó.
Por otro lado, se refirió a los productos importados que ya se pueden ver en las góndolas: “Se ven cada vez más productos importados en los supermercados. Eso genera mayor competencia, lo que ayuda a bajar la inflación”, sostuvo. Y remarcó que si bien no hay un relevamiento oficial sobre el porcentaje de productos que ingresan, se sabe que hay más que en años anteriores.
Finalmente, planteó que para tener un panorama más claro de julio, hay que tener en cuenta algunos factores. “Tendremos que ver qué pasa también si hay movimientos en el tipo de cambio o no, ahora que se termina este efecto de la cosecha, por la reducción de las retenciones del agro, todas estas cosas. Si eso se traslada al tipo de cambio y si ese tipo de cambio, se traslada a precios”, enumeró.