miércoles 25 de junio de 2025 - Edición Nº2394

Provincia | 24 jun 2025

TENSIONES EN TODOS LOS FRENTES

Intendentes bonaerenses presionan para tener la lapicera en el PJ, la UCR y el PRO

Milei y CFK monopolizan, pero en ningún espacio hay promesa de unidad. La ausencia de las PASO provocó la atomización debajo de los líderes. Cómo se resolverán las listas en los municipios. Quiénes tendrán la lapicera.


Por: Ricardo Carossino

Existe un escenario inédito en estas elecciones legislativas que presenta dos escenarios distintos en cuanto a los líderes principales y lo que sucede a partir de ellos para abajo. Milei y Cristina monopolizan la agenda y polarizan la opinión pública, pero hacia abajo la atomización política es total y absoluta.

En una elección como la que viene, donde sólo se disputarán legisladores provinciales, las agendas de los intendentes empiezan a tallar de manera relevante y los 135 jefes comunales de la Provincia de Buenos Aires se pararon de mano mirando al 9 de julio como primera fecha de cierres de acuerdos.

Los intendentes tienen su propia lógica en este juego y todos juegan a sostener su porción de poder local y evitar el fuego amigo, tanto en el peronismo, en el radicalismo como en el PRO ya que las internas arden con los intereses de cada espacio.

Hoy, por supuesto, el elemento que desequilibró la balanza en esta elección es La Libertad Avanza que puso un pie en el territorio bonaerense con la intención de liderar el espacio de la derecha opositor al gobernador Axel Kicillof y según parece hasta el momento lo está logrando, siempre que no se pase de rosca, como advirtió un legislador amarillo al ser consultado por Política del Sur.

Las internas están dinamitando como nunca los acuerdos preelectorales en los que la unidad comienza a representar una utopía y donde todo puede atomizarse de manera insólita sobre todo por la ausencia de las PASO.

De alguna manera, en un escenario moderno en el que tallan los frentes políticos más que los partidos tradicionales, las PASO venían a cumplir un rol ordenador de las internas, pero en ausencia de esta herramienta las necesidades de confrontación de liderazgos calientan como nunca una elección que puede aparecer como única, tal vez igualada por atomizada elección del 2003 en la que Néstor Kirchner se queda con el poder con un 27% de los votos.

Estas internas lo que provocan son recalentar las tensiones de los pueblos en los que muchos dirigentes aspiran a una banca de concejal y a empezar a disputarle el poder a los intendentes que resisten en sus lugares, incluso esperando que la ley que limita las reelecciones se modifique.

Los reclamos están a la orden del día y así como La Cámpora aspira a disputar poder en los distritos que no se cuadran ante el liderazgo de Cristina Kirchner, los libertarios se vuelven rebeldes con los intendentes del PRO y de la UCR que no quieren decir que “sí” a todo lo que pretende Milei.

Tanto los intendentes peronistas como los macristas hoy piden libertad de acción para conformar sus propias listas locales sin intervención de Máximo Kirchner y Sebastián Pareja que pretenden manejar la lapicera a gusto y piachere por orden de sus inmediatos superiores: CFK y JM.

En el medio, los líderes municipales resisten el embate tanto en el interior de la provincia con radicales y amarillos, como sucede en el conurbano con los intendentes alineados al Movimiento Derecho al Futuro.

Lo que piden en el PJ, jefes como Jorge Ferraresi, Juan José Mussi, Lucas Ghi y Alberto Descalzo, por nombrar algunos, es no tener la mano de los kirchneristas en sus propios territorios: que se los respete.

No es nuevo y no es un tema original de los peronistas en esta oportunidad. Los intendentes del PRO, por caso Pablo Petrecca, María José Gentili, Javier Martínez , Soledad Martínez y Ramón Lanús, también empiezan a pedir que el acuerdo con Milei no implique tener la lapicera local y que sean ellos los que decidan los primeros cuatro o cinco lugares de las listas.

Por el momento, ni Milei ni Cristina están cediendo a las demandas municipales y la cuerda empieza a tensarse de manera insólita porque tanto el Presidente de la Nación como la ex vicepresidenta de la Nación, consideran que los votos del 7 de setiembre son de ellos y de nadie más.

Con esa convicción es que Milei quiere condicionar a Mauricio Macri que tendrá que aprobar lo que Cristian Ritondo acuerde con Pareja y Karina Milei y Cristina quiere frenar las aspiraciones de Kicillof que no tuvo empacho en salir a disputar liderazgo.

En tanto, los intendentes de la UCR juegan también su lugar y defienden sus lapiceras locales. Estos radicales, por el momento, rechazan sumarse a lo que Ritondo intenta armar con Pareja e intentan blindarse contra el avance de los libertarios en las secciones electorales donde la UCR aún detenta poder, como la Segunda y la  Cuarta.

Hoy lo que aseveran a PDSUR desde el radicalismo, es que quieren seguir intentando con la ancha avenida del medio, con un frente de centro derecha con el peronismo no K, el socialismo y los amarillos que Ritondo no pueda contener en el acuerdo con LLA.

La sesión rebelde sería la Quinta donde hace pie el senador nacional Maximiliano Abad que busca colarse en el acuerdo con Milei y llevar a la UCR a ampliar ese frente para ganar en la Provincia, convencido de que si están todos juntos, el kirchnerismo no tiene chance de quedarse con el triunfo.

Por su parte, Miguel Fernández y Pablo Domenichini culminaron el sábado pasado una ronda de consultas en las ocho secciones electorales. En todas primó la idea de trabajar en una línea moderada, lejos de los extremos que impone Milei y el kirchnerismo por otro.

Ante la búsqueda de una alternativa de centro lejos de Cristina y Milei quien apareció amenazando fue el Frente Renovador quien mandó un mensaje encriptado con un rumor que llegó a PDSUR por una fuente de la Primera Sección que si La Cámpora y el MDF no acuerdan Sergio Massa podría sumarse a la ancha avenida del medio, aunque una fuente del gobierno bonaerense alertó: “Si quiere irse que se vaya, pero se quedan sin ministerios”. Lo mismo advirtieron para La Cámpora y aclararon: “A nadie le conviene romper en el peronismo”.

 

 

 

 

 

 

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