Horas atrás el abogado de Derechos Humanos, Javier Garín denunció al presidente Javier Milei y a su asesor, Santiago Caputo por la realización de delitos tales como atentado contra el orden constitucional, discriminación, intimidación pública, apología del delito, abuso de autoridad e incumplimiento de los deberes de funcionario público. 

Política del Sur conversó al aire con Javier Garín, quien dio más detalles de la denuncia penal que presentó contra el Poder Ejecutivo, dentro de la cual utiliza el concepto de “método de tanteo”, inspirado en una práctica del nazismo.

Con respecto a este concepto, Garín explicó que “desde que llegó Milei al gobierno han aplicado este método. Es un método de avance político sobre temas que se consideraban intocables, a partir de la experienciade algunos regímenes como el régimen nazi”.

El abogado se refirió al autor austríaco, Stefan Zweig, quien en uno de sus libros expresó que “lo más genial de Hitler fue la táctica de tantear el terreno poco a poco e ir aumentando cada vez más la presión” y utiliza como ejemplo la quema de libros, primero en actos partidarios para ver la reacción de la gente. Lo cual culminó en una ley de prohibición de ciertas lecturas.

Continuando con su explicación, señaló que “al principio parecía como algo que ‘va a pasar, esto es algo momentáneo’, y después se comprobaba que se institucionalizaba y se convertía en una práctica normal y legal”.

En ese sentido, comentó: “Y yo veo desde hace tiempo que estas cosas vienen avanzando en Argentina. Yo hice tres denuncias contra Milei. La primera fue por apología al terrorismo de Estado, la segunda por este tema y la tercera por la criptomoneda”.

Asimismo afirmó que esta vez, sumó una encuesta encargada por Santiago Caputo “para medir si los argentinos aceptarían un régimen autoritario. Y esto salió publicado en varios medios”. Una de las preguntas del sondeo era “¿En qué país prefiere vivir? En un país con un gobierno autoritario que logre buenos resultados económicos o en un país que respete los derechos individuales de las personas”.

“Obviamente a lo que apuntaba esta encuesta era a ir instalando progresivamente que si hay buenos resultados, está todo justificado. Y vemos avanzando una agenda global del odio”, manifestó y apuntó contra las requisas de los últimos días y el ciberpatrullaje que se permite a partir del nuevo decreto de regulación de la PFA.

Siguiendo con esta línea, subrayó que “es un avance continuo en una agenda del odio y de la discriminación” a través de diferentes organizaciones ultraderechistas a nivel mundial. 

Mientras que en Argentina existe “la pretensión de que cualquier reclamo constituye un atentado contra la gobernabilidad y se sale a reprimir de manera salvaje”, remarcó. También recalcó: “Se va instalando todo un lenguaje del odio que se naturaliza a partir del odio que se promueve desde el propio gobierno”.

Continuando con lo anterior, reconoció que “vamos avanzando en una deriva autoritaria que solo se va a frenar con el pueblo en la calle. Como ocurrió el día de ayer. El protocolo antipiquete no funcionó ayer”.

Sobre la denuncia que realizó, asumió que “es un abuso de autoridad, un incumplimiento de los deberes de funcionario público. Sus declaraciones van directamente en contra de convenciones internacionales que firmó la Argentina”. Y recordó los discursos de Javier Milei contra las mujeres, las diversidades y los pueblos originarios.

Finalmente en relación al accionar de la justicia a partir de esta denuncia, reflexionó que “yo no tengo ninguna confianza en que la justicia federal de Comodoro Py vaya a hacer nada. Porque realmente es una justicia que solo actúa cuando alguien deja el poder. Lo hemos visto constantemente desde el comienzo de la democracia”. 

Sin embargo, sopesó que “es necesario hacerlas porque es una manera de poner en evidencia los comportamientos que está teniendo el gobierno y también para dejar un testimonio”.