

Luego de tres semanas de clausura, reabrieron las ferias de La Salada. Las ferias Ocean y Urkupiña, comenzaron nuevamente sus actividades el pasado lunes bajo unas estrictas condiciones legales sobre los titulares de cada puesto.
Política del Sur conversó al aire con Mariana Berbeglia, secretaria general de SUTFRA, sindicato que se está ocupando de los trámites para el correcto registro de los titulares de cada puesto.
“El juzgado nos ha dado la misión de poder hacer el registro de feriantes, luego de que nosotros hemos hecho la presentación para la reapertura de los predios”, expresó Berbeglia quien agregó que desde SUTFRA consideran que “los trabajadores nada tienen que ver con la situación que se vive en la causa”.
Según comentó, desde el día viernes, el sindicato se encuentra presente en el predio de La Salada, “haciendo el registro, afiliando y trabajando para el blanqueo de la actividad feriante, que la realidad es que nunca estuvo blanqueada”, afirmando también que todavía no figura en en el nomenclador de ARCA.
En esa línea, afirmó que en todo el predio, contando las cinco ferias y los paseos de compra lindantes hay alrededor de 48.000 trabajadores. “Siempre se tomó en cuenta que con que sea monotributista el titular del puesto, alcanzaba. Pero la realidad es que por cada puesto mínimamente hay tres trabajadores. La inclusión que nosotros pedimos, es el blanqueo de todos los trabajadores”, manifestó.
Asimismo explicó que el dueño del puesto tiene “una relación encubierta con el propietario o la sociedad anónima del predio”. Cada puesto tiene un valor de $2.000.000 y se preguntó “¿quién gana ahí? ¿el trabajador feriante que va a vender lo que produce o o aquel que es el propietario de ese local?”.
Por otro lado, explicó que cada feria contaba con una administración y que ahora, debido a lo ocurrido, las ferias Ocean, Urkupiña y Punta Mogotes, tendrán un interventor para ordenar la administración. Además, “a pedido de la fiscal, nosotros seríamos veedores de esos interventores para velar por los derechos del trabajador”, señaló.
“Gracias a que esté el sindicato, van a empezar a tener los derechos que tiene cualquier trabajador en cualquier empresa” y remarcó que hay mucha gente que va a comprar a La Salada para revender en otras ferias, “entonces le está dando de comer a casi 1.300.000 trabajadores de todo el país”.
En otro orden, subrayó que “lo que sí hay que contemplar es que al feriante lo tenés que ir educando y tiene que ser de a poco”, tanto a nivel financiero como para la importación legal de la mercadería que se vende. “Todo eso lleva un proceso de educación en el cual nosotros estamos muy involucrados y capacitados”, agregó.
Finalmente, consideró que “es darle la oportunidad a muchísimos argentinos a ordenarse, a no encarecer. No tengan miedo los que van a comprar porque los precios se van a mantener, solo que hay que cambiar en los modos, que no estaban acostumbrados”.