Luego de las versiones que indicaban un retiro de la actividad gremial, Pablo Moyano, secretario adjunto del Sindicato de Camioneros y presidente del Club Camioneros, reapareció en público y envió un mensaje directo a quienes lo daban fuera del mapa sindical: "Sigo estando en el gremio, sigo defendiendo a los trabajadores. Por más que hayan dicho que yo me iba a dedicar al fútbol. El fútbol y el gremio", afirmó con firmeza.
Pero su reaparición no es solo deportiva. Pablo Moyano atraviesa una interna con su padre, Hugo Moyano, histórica figura del gremio, quien logró desplazarlo de la mayoría de los espacios de poder dentro de la organización y de la Secretaria General de la CGT. La crisis en la obra social OSCHOCA fue un punto clave del conflicto que derivó en la ruptura entre ambos.
El mensaje llegó tras el triunfo del equipo frente a Victoriano Arenas, con el que el club cerró la primera ronda de la Primera C como puntero de la Zona B. "Tuvimos un triunfo muy importante y seguimos primeros en la general", celebró Moyano, que acompañó al plantel como presidente de la institución
Desde la tribuna y con micrófono en mano, Pablo también valoró el esfuerzo del equipo: "Ya les habían hecho mucho daño a los jugadores, al cuerpo técnico, al equipo en general. Esta categoría es muy distinta, muy dura, pero el grupo respondió con trabajo y compromiso".
Pablo Moyano anunció su renuncia a la Confederación General del Trabajo (CGT) el 22 de noviembre de 2024, marcando el fin de su carrera dentro de la central sindical. Esta decisión llegó tras un periodo de silencio, en el cual se hizo presente en la movilización por el Día de la Memoria, pero lo hizo solo, lo que generó especulaciones sobre su futuro. Tiempo después, versiones periodísticas aseguran que ya anunció su retiro no sólo de la central obrera sino de toda actividad vinculada con el movimiento gremial.
A lo largo de los últimos días, Pablo Moyano comenzó a enviar señales claras sobre su intención de alejarse del sindicalismo. "Me retiro de todo", fue la frase que resonó entre sus pares, aunque no sorprendió del todo, ya que sus decisiones recientes indicaban un cambio de rumbo. El Pablo Moyano que alguna vez se mostró empoderado, parece haber quedado atrás. Con esta renuncia, se abre una nueva etapa en la vida de Moyano, quien ha decidido volcar su atención hacia el fútbol y proyectos sociales.
Su última aparición pública fue en la marcha de la memoria del 24 de marzo, cuando encabezó una columna propia de un sector de Camioneros, pero se retiró de la concentración cuando llegó la fila que liderada su padre Hugo, legendario conductor del gremio del transporte. Muy crítico de la gestión del gobierno de ultraderecha que encabeza Javier Milei, Pablo Moyano se alejó de a conducción de la central obrera disconforme con la tibieza de la cúpula sindical frente a la administración libertaria.
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