La educación atraviesa actualmente una importante crisis debido a las medidas del gobierno nacional que realizó importantes recortes en el área. No solamente la educación pública corre riesgo, sino que también se ven afectadas las instituciones privadas.

Política del Sur conversó al aire con Martín Zurita, Secretario ejecutivo de la Asociación de Institutos Privados de la Argentina (AIEPBA), quien habló sobre el aumento de la cuota de los colegios privados y cómo la situación económica complica también a estos centros educativos. 

“A partir de este mes, las escuelas que reciben aporte del estado, que son el 70% de las 6.300 que hay en en la Provincia, están autorizadas a un aumento del 6,5%  para este mes de junio”, adelantó Zurita.

En ese sentido, explicó que el aumento es en consonancia con el acuerdo paritario de los docentes en la Provincia, “ teniendo en cuenta que en la ecuación de nuestro sector, entre el 80% y el 90% de lo que es la cuota de un colegio privado es costo laboral”.

Asimismo, afirmó que con este incremento, tampoco se alcanza a cubrir los gastos de los servicios de luz, agua y gas. “Eso no está contemplado”, remarcó. Y señaló que desde el año pasado, los incrementos en las cuotas lograron emparejarse con los aumentos de salario, ya que anteriormente “hemos quedado bastante rezagados, con lo cual el sector viene de una situación bastante complicada”.

En esa misma línea, aseguró que “el sector de a poco se va recuperando” y que a pesar de la situación social y económica actual, el número de alumnos matriculados en colegios privados, “se viene manteniendo hace 20 años aproximadamente y tiene un nivel de descenso muy mínimo, no es pronunciado”.

“Las familias hacen un gran esfuerzo para sostener la matrícula en la escuela privada y creo que es lo último que se resigna”, destacó. Y comentó que hay entre un 4% y 5% de morosidad en promedio de todas las escuelas. “En realidad hay un conocimiento de la situación de la familia y las escuelas, en lo que puedan poner el hombro, lo hacen”, enfatizó.

Sin embargo, aseveró que la baja de matrículas se da más que nada en las salas de jardín de infantes de 3 a 5 años y en primer y segundo grado. Pero este fenómeno “tiene que ver con el descenso de la natalidad, que es un problema que afecta a toda la educación argentina y de los países de América Latina e inclusive del mundo”.

Esta problemática, según relató el secretario ejecutivo, en el futuro afectará fuertemente a todo el sistema educativo, ya que “muchas escuelas que hoy ofrecen jornada simple, se tendrán que reconvertir y ofrecer jornada completa, por ejemplo, como una de las posibilidades”, para poder mantenerse a flote. “En el estado tal vez es más fácil realizar todo este tipo de ingeniería, en la privada que tenés un solo propietario es más complicado”, subrayó.