Durante la mañana del lunes 2 de mayo, feriantes de la histórica feria de La Salada realizaron una manifestación y corte del puente La Noria, luego de denunciar que hace 11 días que no los dejan trabajar.

Política del Sur conversó al aire con Mariana Berbeglia, secretaria general de SUTFRA (Sindicato Único de Trabajadores Feriantes de la República Argentina), quien habló sobre la situación de los trabajadores.

Berbeglia afirmó que desde el sindicato buscan entablar un diálogo con los trabajadores que impulsaron la medida de fuerza porque consideran que “ese no es el camino. El camino es presentarse en el juzgado, en la fiscalía, como lo hemos hecho, tratando de llegar a un acuerdo y lograr la reactivación del trabajo de ellos”.

En ese sentido expresó que lo principal es que se legalice la actividad feriante, ya que hoy en día es ilegal y “no está en el nomenclador del ARCA”. Y señaló que “tenemos que ir por la transparencia, por la legalidad de la actividad”.

“Nos tenemos que poner a trabajar en conjunto y blanquear la actividad, vamos a lograr que los trabajadores sean formales y sobre todo que se termine la mercadería ilegal y la violación de marcas”, expresó. 

Berbeglia además remarcó que la actividad existe hace muchísimos años y desde el sindicato crearon una aplicación “para que los feriantes puedan tener su primer monotributo, que puedan empezar a pagar, que empiecen a utilizar los medios bancarios. Se tiene que terminar la informalidad”.

Con respecto a La Salada, remarcó que es una feria que no está habilitada, tiene una habilitación provisoria. Los feriantes pagan por tener su puesto pero siguen sin ser trabajadores registrados. “Nosotros consideramos que si estuvieran formalizadas las ferias, si estuvieran en el nomenclador de ARCA, sería más fácil”. Y destacó que los puesteros “tienen que tener hasta un monotributo diferente que el resto de los argentinos porque venden por volumen y ganan poco”.

Si bien la Secretaria general no profundizó en la cuestión de las denuncias a los dueños sobre ilegalidad y contrabando, enfatizó en la importancia de la formalización de la actividad para poder actuar como sindicato en La Salada: “Nuestra principal misión es lograr que los feriantes estén formales, que tengan los derechos de cualquier trabajador, que se incluyan en las recomendaciones 198 y 204 de la OIT. Ese es el trabajo que va a provocar el cambio real”.

En esa misma línea remarcó que “tanto el juez como la fiscal están haciendo bien su trabajo, así que deben tener pruebas, pero no nos tenemos que olvidar que hay entre 20 mil y 30 mil trabajadores que tienen que empezar a trabajar”.

Finalmente, subrayó que con respecto a esta feria “se hizo la vista gorda durante muchos años porque era cómodo, porque era fácil”. Pero de igual manera, reafirmó, “llegó el momento de empezar a ordenar y que los trabajadores puedan trabajar con derechos, porque estaban en la ilegalidad, en la informalidad y la realidad es que tampoco tenían ningún tipo de derecho”.