El “Loco” Enrique, histórico ex jugador de Independiente y River, días atrás sufrió un ataque al corazón y fue intervenido en el hospital de Quilmes. Su hermano, el “Negro” Enrique dio a conocer la dificil situación que estaba atravesando la familia, a través de una historia de instagram.

Política del Sur conversó al aire con Alejo Escos, otro ex jugador de Temperley y gran amigo de los hermanos Enrique, quien pudo dar cuenta de la salud del Loco.

“Ayer hablé con el Negro y con él un poquito y está bien ya. Ya salió del problema. Lo llevaron rápido al hospital porque era grave el asunto. Y zafó. Ahora está re contento agradeciendo a todo el mundo que los saludo”, aseguró Escos.

El ex jugador aseguró que según lo que pudo hablar con el Negro Enrique, la hospitalización y la intervención fueron muy rápidas. “Lo rehabilitaron y ya creo que está para que le den el alta. Gracias a Dios, está todo bien”, confirmó.

En ese sentido Escos se refirió al deterioro en la salud de la mayoría de los deportistas, luego de dejar de jugar y abandonar la rutina y los entrenamientos, como una posible causa al infarto que tuvo el Loco Enrique. “Es un problema que le pasa a muchísimos jugadores, que dejan y después vienen los problemas. Porque la ansiedad, ese tipo de cosas existe, lamentablemente. Dejan de ir a practicar, de correr, de hacer. Lo dejás por unos años, bueno, y después eso trae consecuencias”.

Por su parte, Alejo Escos contó en vivo que actualmente reside en Los Ángeles, en donde dirige una escuela de fútbol con el nombre del club que lo vio nacer, Temperley. Además tiene cerca el Glendale Sports Complex, un complejo deportivo con canchas de fútbol, béisbol y softbol. Allí, contó que se reúnen muchos otros ex deportistas, mayores de 40, 50 y 60 años y en donde se encontró con una gran cantidad de argentinos futboleros.

“Hay un guatemalteco que jugó en la selección de Guatemala hace muchos años, que tiene 98. No sabe lo que es, corre como un hijo de puta, corre más que todos, es un fenómeno”, destacó entre risas.

Finalmente se despidió recordando el mítico pase del Negro Enrique a Maradona en el partido contra Inglaterra en el mundial de México ‘86. Donde logró que el delantero hiciera una carrera de más de 60 metros, esquivara a cinco jugadores ingleses y al arquero, concluyendo en el famoso “gol del siglo”: “Él jodía con Diego, decía ‘Me da un pase de un metro y dice que lo dejé solo frente a Shilton”.