Desde hace un tiempo ya que la situación entre simpatizantes caracterizados de Brown de Adrogué y San Martin de Burzaco es bastante tensa, nunca llegó a puntos altos como para generar enfrentamientos de alto vuelo pero si se habían generado peleas aisladas en las esquinas de algún barrio del distrito o batallas de brochas con pintadas quemadas, vandalizadas, etc. Por ende, uno podría hacerse la idea de que la llegada del clásico podría ser un detonante para que esa crispidez vivida en meses anteriores tenga finalmente su ebullición y desgraciadamente terminó siendo de esa manera.

Durante las primeras horas del sábado entre la 1AM y las 2AM, dos hinchas sin identificar de Brown de Adrogue se acercaron a pie hacia el estadio Fransisco Boga para arrojar dos cócteles Molotov que impactaron contra una de las paredes del predio. "Nosotros alrededor de la 1 de la mañana del sábado sufrimos un ataque con una molotov a una de las paredes de la institución que nos dejo muy preocupados porque cayó cerca de una de las tomas de gas", señaló Gabriel Ostanelli, presidente del club en diálogo con Deportes del Sur.

Afortunadamente este fuego causado por la mañana fue rápidamente disipado y no hubo que lamentar ningún inconveniente pero este altercado fue detonante para que un grupo de hinchas de San Martin de Burzaco tomara represalias un par de horas antes del encuentro. Al rededor de la 13:00 del sábado, dos autos salieron en dirección al Lorenzo Arandilla con la intención de increpar a un grupo de hinchas autoconvocados que se organizaron para vivir la previa del clásico. Al llegar a las zonas aledañas al estadio, los hinchas de San Martin descendieron de su vehículos para atacar a golpe de puño a algunos hinchas de Brown que se encontraban arreglando unos murales que habían sido vandalizados con anterioridad. La batalla que comenzó a golpe de puño rápidamente escalo en su nivel de violencia y unos minutos posterior a la 13:00 horas comenzaron a escucharse detonaciones de arma de fuego. Varios disparos además fueron efectuados de manera directa hacia el estadio durante un par de minutos hasta que nuevamente el silencio volvió a apoderarse de la tarde y ambos vehículos emprendieron retorno hacia su lugar de origen. Afortunadamente no hubo que lamentar ningun descenso, ni ningún herido de gravedad. Se habla únicamente de tres heridos con arma de fuego pero de manera leve.