

Por: Federico Cedarri
Los libertarios mileístas se endurecen raudamente en lo que tiene que ver con la posibilidad de avanzar en un acuerdo electoral con el PRO bonaerense.
Es que luego del affaire del cripto-gate y más allá del apoyo de los amarillos en el Congreso Nacional colaborando para evitar la conformación de una comisión investigadora, las declaraciones de Mauricio Macri consideradas desde el entorno presidencial como lacerantes han montado en cólera a Karina Milei.
El Jefe le habría ordenado al armador bonaerense Sebastián Pareja que comience a abonar el campo para que LLA concurra en solitario a las elecciones de medio término alejada del PRO y eventualmente de algunos radicales con peluca: “La línea que baja de la Rosada es que debemos armar para ir solos, después si hay alianza con el PRO vemos pero por el momento nos preparamos para ir solos”, destaca un operador violeta a PDS.
Más allá del enojo circunstancial de Karina, en las huestes libertarias siguen manejando la idea de continuar la seducción política a intendentes y referentes macristas y de este modo evitar tener que ir al pie del ex presidente para iniciar una negociación: “Para nosotros ir solos es todo ganancia, aparte le hemos robado el electorado al PRO”, chicanean.
Lo cierto es que Pareja viene apadrinando la incorporación de un puñado de concejales bullristas de distintos distritos bonaerenses al campamento de las fuerzas del cielo.
Como viene dando cuenta PDS, en el PRO se comienzan a perfilar dos sectores diferenciados en cuanto a la política de alianzas, ya no hay uniformidad respecto a la chance de avanzar para sellar un pacto con los violetas.
El titular partidario bonaerense Cristian Ritondo y el entusiasta Diego Santilli, esperanzado en ser el candidato de la unidad amarilla violeta, son los que más empujan por un entendimiento aunque los dos dejan en claro que debe configurarse en términos de alianza política preservando cada fuerza su identidad.
Del lado del jorgemacrismo, donde se alistan la alcaldesa de Vicente López Soledad Martínez y el juninense Pablo Petrecca, se afianza la idea de no entregar las banderas a los mileístas y comienzan a bosquejar la chance de reeditar Juntos por el Cambio con los radicales que manejan el Comité Provincia.
El inconveniente que despunta esta última posibilidad es que tanto el PRO como el radicalismo, según encuetas que consultan asiduamente en los campamentos políticos, apenas si arañarían los 8 o 9 puntos.
Sin embargo, los libertarios no pasan por alto el detalle de que en la provincia de Buenos Aires ese puñado de puntos puede dividirle el electorado a la centroderecha y permitirle por añadidura una nueva victoria al peronismo: “Las definiciones se van a dar más cerca de mayo y sobre todo se acelerarán cuando tengamos el cronograma electoral de la provincia”, explica otro fuente libertaria a este portal.
Los violetas descuentan que Axel Kicillof avanzará con el desdoblamiento por lo que han comenzado a circular borradores que dan cuenta de dos estrategias diferentes de campaña, la de diputados nacionales focalizada en las profusión de la estabilidad económica y la figura de Javier Milei y la provincial más centrada en el cuestionamiento de la gestión bonaerense sobre todo en lo que respecta a la inseguridad.
Subirán a esa campaña a la ministra de Seguridad Patricia Bullrich ya que los focus group que realizan asiduamente les indican que en el conurbano bonaerense la ciudadanía clama por la presencia de las fuerzas nacionales como Gendarmería para combatir el delito.
Luego del cripto-gate han quedado congelados de momento, aunque no descartados, los saltos formales hacia la LLA de parte del lanusense Néstor Grindetti, del jefe comunal marplatense Guillermo Montenegro y del sanisidrense Ramón Lanús.
Al malestar que despertó hacia adentro del PRO la incorporación a las filas violetas de la intendenta de Capitán Sarmiento, Fernanda Astori, se agregó la resistencia de los concejales amarillos de aquel distrito a seguirla en su aventura lo que puso en pausa cualquier avance premeditado de otros intendentes.
Más allá de las escaramuzas en la discusión con el PRO, los libertarios tampoco esconden que una de las cuestiones que los estaría empujando a ir solos a la elección bonaerense data de la mala experiencia que han tenido cuando intentaron alianzas por la falta de sellos en 2023.
Hoy en el Parlamento provincial hay una bancada de nueve legisladores capitaneados por Gustavo Cuervo que ingresaron con el arrastre presidencial pero que rápidamente tomaron distancia del Ejecutivo nacional y hoy aspiran a construir una tercera vía electoral en la provincia.
En el Senado ocurre idéntica situación con el bloque de tres integrantes que capitanea el ex armador de Javier Milei, Carlos Kikuchi.
Ante esta circunstancia es que comienza a predominar la idea de la pureza por sobre las hipotética alianzas.
“Tenemos todo para ganar y nada para perder, aún si no ganamos la provincia sumaremos muchos legisladores”, analizan cerca de Pareja.
Lo cierto es que en la Cámara de Diputados bonaerense hoy comparten con el PRO la segunda minora con 13 integrantes y son escasas las bancas que deben revalidar, entre ellas la del vasco Sebastián Pascual que vino acumplir los dos años restante de Nahuel Sotelo cuando éste escaló al gobierno nacional.
Mientras que en el Senado deberá revalidar dos de cinco escaños que detenta actualmente: se les vence el mandato a Daniela Reich y a Joaquín de la Torre.
Trascendió que tanto la esposa del alcalde de Tres de Febrero, Diego Valenzuela, como el líder político de San Miguel podrían ser los cabezas de lista por la Primera Sección electoral que renueva senadores en este turno.