

Sigue la búsqueda del asesino prófugo por el crimen de Leandro Ojeda, el hombre baleado en la cabeza el jueves pasado en frente de su casa de Ingeniero Budge, en circunstancias que todavía no fueron establecidas.
Fuentes judiciales indicaron a Política del Sur que se hicieron varios allanamientos en busca del presunto autor del hecho, que se habría fugado del barrio luego de atacar a la víctima, cuando este estaba dentro de su auto estacionado en Saladillo al 2000.
Mientras tanto, desde el entorno familiar de Ojeda descartan la hipótesis de un ajuste de cuentas por un supuesto conflicto previo del hombre de 33 años con el asesino.
“No creo que él haya tenido ningún problema, (...) él no era conflictivo con nadie, siempre fue bueno con todos", aseguró Hugo, padre de Leandro, en declaraciones televisivas, consideró: "Acá hubo una confusión".
Según trascendió, Ojeda estaba dentro de su Ford Falcon celeste, que todavía estaba reparando, antes de ser asesinado. La cámara de vigilancia marcaba la 1:52 cuando “Mojarra”, como es conocido por los vecinos, caminó hacia el auto, disparó a varios metros de distancia y huyó corriendo.
De acuerdo con las fuentes oficiales, usó una pistola 9 milímetros. La policía contó ocho disparos que impactaron en distintas partes del auto. Al menos una de las balas, que perforó el parabrisas, impactó a Leandro Ojeda en la frente.
El victimario, que vive a tres cuadras del lugar del crimen, habían pasado pocos minutos antes del crimen y saludó a su víctima, según contaron los testigos. Luego, volvió, disparó a varios metros de distancia y huyó corriendo.
Para el fiscal Ricardo Silvestrini, titular de la UFI 11 de Lomas de Zamora, pudo haberse tratado de una venganza por un viejo conflicto que tenían Ojeda y el asesino, y descartó la hipótesis del robo.