

Por: Federico Cedarri
El gobernador bonaerense Axel Kicillof inauguró este lunes las sesiones ordinarias en la Legislatura con un discurso confrontativo y de alto perfil opositor contra la administración nacional de Javier Milei.
Lejos de mostrarse contemporizador, el mandatario redobló la puesta y arremetió con fuerza contra el ajuste, aseguró que el Presidente no respeta a la provincia de Buenos Aires y hasta tildó al ministro de Economía, Luis Caputo, como el campeón de la fuga de capitales.
También apuntó contra el asesor presidencial Federico Sturzenegger: "El famoso DNU ilegal fue elaborado por alguien del elenco estable de los 90 junto a Cavallo y De la Rúa”.
En el final de su alocución, el mandatario respondió a la convocatoria de Milei a los gobernadores para celebrar el Pacto de Mayo: "Cuenten con nosotros para reuniones de trabajo y para debatir, aunque si se trata meramente de un encuentro para la foto y marketing, arranquen nomás si no llegamos”, gatilló.
En un abierto desafío al Presidente, enumeró un decálogo de medidas como condición para avanzar en el diálogo con el Gobierno nacional: “La inmediata reactivación de la obra pública frenada caprichosamente, el respeto al federalismo y la inmediata reposición de los fondos vengativamente quitados a las provincias argentinas, la devolución de los fondos del FONID y para transporte, la urgente distribución de los recursos a los comedores escolares y medicamentos, la derogación del DNU ilegal, el rechazo al proyecto delirante de dolarización, el dragado del Canal de Magdalena y el reclamo por la soberanía en las Islas Malvinas".
"Nuestro pacto es con el pueblo y con la provincia y nunca lo vamos a traicionar”, cerró.
En el comienzo de su alocución, el mandatario lamentó del tiempo político que transcurre: “Me hubiera gustado comenzar en un contexto diferente y no en esta instancia sombría", se sinceró. Además, Kicillof calificó el gobierno de Milei de “extravagante experimento”.
Explicó que durante sus primeros cuatro años de gestión se había puesto en marcha un plan de infraestructura y ampliación de derechos que los bonaerenses respaldaron: "Tuvimos derecho a la dignidad".
El Gobernador sostuvo que es criminal interrumpir los recursos a la provincia: "La historia juzgará el goce sádico que estamos presenciando”, disparó.
Kicillof señaló que los 90 días del gobierno de Milei dejan una enseñanza patente: “El Presidente no quiere achicar el Estado sino desintegrarlo, este objetivo que abraza Milei tropieza con un primer y determinante obstáculo, nuestra Constitución Nacional".
Buscó marcar una diferencia crucial con el Gobierno nacional: “Gobernamos en las buenas y en las malas con seriedad y responsabilidad, no discriminando a los distritos por más que no los gobierne el oficialismo”.
De manera posterior hizo un manifiesto compromiso: “Hoy más que nunca, me comprometo con el pueblo de la provincia a seguir gobernando con transparencia, compromiso y sin descanso por el bienestar general, en defensa de los derechos de nuestro pueblo y en defensa de los intereses de nuestra Provincia”.
“Los problemas no se solucionan con motosierra, dinamita ni con ajuste”, completó.
Kicillof consideró que la solución no pasa por el ajuste: “Hacen falta más derechos y más y mejor Estado”.
El Gobernador se mostró, no obstante, contemplativo con la porción importante de la sociedad que votó a Milei aunque no dejó de marcar su disidencia: “La mayoría votó esperanzada a un Presidente cuya ideas no compartimos, tristemente esas esperanzas están siendo brutalmente traicionadas”, aseguró.
“La propuesta que ganó está en las antípodas de nuestra manera de ver la vida y la economía”, indicó.
Kicillof pidió a Nación que respete al gobierno que votó la mayoría de los bonaerenses: “La democracia se trata de respetarnos mutuamente y cumplir con la Constitución, no se trata de amenazar o agredir a quienes no están de acuerdo o a los que pensamos diferente".
El Gobernador contrarió la premisa presidencial: “Nunca el ajuste es inevitable, nunca es remedio para nuestros problemas, los trabajadores y los sectores medios no pueden seguir haciendo sacrificios”. “Austeridad para gobernar si, sacrificios inconducentes para el pueblo no”, remató.
Luego ahondó en las contradicciones del Presidente respecto a sus promesas de campaña: “Nunca nos dijeron que el ajuste era para los trabajadores y la clase media, dejaron en evidencia que los únicos perjudicados son los que menos tienen”.
En la misma sintonía consideró que desde que asumió el actual gobierno “las consecuencias han sido catastróficas, la cosa es simple, más sufrimiento para la mayoría”.
Resaltó que muchos de los votantes perciben que fueron traicionados: “Estos primeros tres meses nos dieron doloroso ejemplos, menos salud, menos seguridad, menos industria y menos pymes".
En lo que tiene que ver con la perspectiva con que la que afrontará su gobierno los cuatro años venideros en la provincia de Buenos Aires, Kicillof anticipó que se abocará a garantizar un Estado presente y un pueblo solidario.
El Gobernador cuestionó con severidad la paralización total de la obra pública nacional en territorio bonaerense y el perjuicio económico que ello causa: “Las obras o las hace el Estado o no hay dignidad en la provincia de Buenos Aires”.
Instó al titular del Ejecutivo nacional a que reanude las obras de manera urgente para garantizar el trabajo y la dignidad: “Las decisiones que tomó el Gobierno nacional no son contra el Gobernador, son contra la provincia de Buenos Aires y deben terminarse”.
Kicillof aseguró que la provincia de Buenos Aires es la que menos gasta por cantidad de habitante lo que la constituye en la más austera de la Argentina.
Anticipó que todas las medidas que se tomen serán para amortiguar todo lo que ha abandonando el gobierno central: “Nuestras posibilidades son limitadas, sino hay recursos suficientes los reemplazaremos con más presencia y más solidaridad”.
Celebró, en tanto, que por quinto año consecutivo las clases comenzaron en tiempo y forma: “Eso no se debió a una afinidad con los dirigentes sino a la importante inversión de la provincia y el respeto a los trabajadores, la educación es prioridad inclaudicable".
Kicillof abogó por un sistema impositivo más justo al que deben contribuir en mayor proporción los que más tienen y más pueden.
En ese sentido, destacó la medida adoptada de solicitar una contribución solidaria de adelanto de Ingresos Brutos a más de 200 empresas de alta concentración para solventar en parte los recortes que lleva adelante el Gobierno nacional.
El Gobernador precisó que más allá de la decisión del Gobierno nacional de paralizar las obras, la provincia se pondrá al hombro la construcción de 86 centros de desarrollo infantil que favorecen a niños y niñas, además de tres escuelas técnicas y el compromiso de continuar con los proyectos más relevantes en materia de agua y cloacas en Berazategui y Olavarría.
Denunció la paralización de 19 mil viviendas por el Gobierno nacional y sentenció que la provincia sostendrá la continuidad de más de 7000 viviendas que se encuentran en ejecución en la provincia de Buenos Aires.