jueves 12 de junio de 2025 - Edición Nº2381

Gremiales | 24 nov 2023

ANÁLISIS

Ante los primeros anuncios de Milei presidente, los gremios preparan “la era de la resistencia”

La idea de privatizar buena parte de las empresas estatales y realizar un ajuste monumental del gasto fueron recibidas como amenazas directas a los trabajadores, por lo que se comenzó a organizar los diques de contención. En la CGT apuran una cumbre para fijar postura, ante la urgencia de los eventos.


Por: Diego Lanese

En una batería de entrevistas televisivas, el presidente electo Javier Milei fue dando definiciones de sus primeros pasos al frente del gobierno. Mediante un sistema que se parece mucho a un spot de campaña –las versiones indican que la filmación del encuentro la hace su equipo de comunicación y la entrega editada a los canales –el libertario comenzó a dar señales de sus primeras medidas. Achicar el Estado y privatizar muchas de sus empresas es la primera gran propuesta, junto con un ajuste, que aseguró “lo dijo en campaña”, lo que no lo hace menos doloroso ni menos impactante. Ante esto, los gremios reaccionaron con reuniones para discutir sus posturas, ante el silencio de los referentes del peronismo, todavía golpeados por la derrota. Así, comenzaron los encuentros y las asambleas, las discusiones, y las primeras medidas, en especial en el sector público. Así, comenzó a configurarse la “era de la resistencia”, como ya anuncian algunos que serán los próximos ¿cuatro? años. En este camino, hay expectativa en lo que haga la CGT, la principal central del país, que en una primera reacción tuvo gestos de distención, pero que luego de su primera cumbre afirmó que “bajo ningún punto de vista aceptará la pérdida de derechos de los trabajadores”.

 

La alarma del movimiento obrero es comprensible, ya que Milei quiere achicar el Estado nacional y el gasto público a niveles hasta ahora nunca vistos. Por eso los primeros en activar medidas de resistencia son los estatales. ATE llamó a una reunión extraordinaria de su conducción, y luego comenzaron las asambleas en todos los organismos. La declaración de estado de “alerta y movilización” es el principio de las medidas a tomar en el plan de lucha que se viene, según adelantó un dirigente ante la consulta de Política del Sur. “Lo que se viene es menemismo puro y duro, en los 90 vimos estas medidas, no es que sean nuevas o las haya inventado Milei”, explicó el mismo dirigente, que comenzó en el estado a fines de los ‘80. Esta idea se extiende en muchos de los encuentros que se llevan adelante en las dependencias estatales, como en el CONICET, donde hay especial temor, ya que en el video viral donde el ahora presidente electo sacaba ministerios al grito de “afuera”, adelantaba que la entidad más importante de ciencia y tecnología del país sería cerrada. Por eso esta semana se multiplicaron los encuentros en los lugares de trabajo.

En tanto, ante los nuevos avances en dirección del ajuste, ATE no sólo se declaró en estado de alerta. Fuentes del gremio confirmaron que el próximo lunes “podría haber medidas concretas”, a las que se sumarían otros espacios, como el gremio de los trabajadores viales o el gremio del PAMI. En tanto, el secretario general de la entidad difundió declaraciones donde se mostró alarmado por lo que pueda pasar en este tiempo. Según publicó en su cuenta de redes sociales, Rodolfo Aguiar se preguntó si “¿no era que el recorte del gasto era para la política?”. “Parece que la motosierra de Milei empieza por el aguinaldo de los trabajadores, no por la casta”, sostuvo. De esta manera, criticó con dureza la posibilidad de que el gobierno de Milei no pague el medio aguinaldo, un derecho conquistado en diciembre de 1945, que se cumple interrumpidamente desde hace 77 años, incorporado a la Ley de Contrato de Trabajo 20.744. “No vamos a aceptar que se deje de pagar el medio aguinaldo. Cada vez es más evidente que la nueva gestión pretende que la primera variable de ajuste seamos los trabajadores. ¿Por qué no deja de pagarle al Fondo Monetario?”, cuestionó el dirigente. El dirigente de ATE advirtió que “es el gobierno de Milei el que empujaría la paz social por la ventana como un orco incivilizado que atenta contra la ley”. “¿Dónde quedó eso de dentro de la ley todo, fuera de la ley nada?”, concluyó.

 

En declaraciones previas, el propio conductor de ATE cuestionó el posible acercamiento de la CGT al gobierno que asume el 10 de diciembre, sospechando que algunas declaraciones iban en esa dirección. Este jueves, hubo una reunión en la sede de la UOCRA, donde la mesa chica cegetista discutió su inminente rol. Según le dijo a la prensa Héctor Daer, “bajo ningún punto de vista aceptará la pérdida de derechos de los trabajadores bajo la gestión presidencial de Milei”. “A unos (las urnas) le dieron la potestad de gobernar y a otros, de representar a un sector de la sociedad que apostó por otro camino. Estamos decididos a, bajo ningún punto de vista, aceptar la pérdida de derechos laborales y que no le paguen los salarios a la gente", expresó el cotitular de la CGT. El secretario General del gremio de Sanidad y uno de los titulares de la CGT comentó que hasta que Milei asuma la presidencia, el próximo 10 de diciembre, no le pedirán una reunión para analizar la situación laboral de las y los argentinos. “Las cosas hay que verlas en un marco de formalidad. Hasta que no asuma, no tendríamos que pedir una reunión”, resaltó.

En medio de la alarma de los gremios, se conoció una encuesta muy particular, donde se especula qué tipo de trabajador votó a Milei. Los datos no dejan de sorprender. Según un trabajo de la encuestadora Prosumia, que en la previa a la segunda vuelta proyectó que Milei ganaría por 11 puntos, usó esa información para determinar a qué se dedican los votantes, en general. En este sentido, el reporte recalcó que Milei “recogió el 50, 8 por ciento de las preferencias en asalariados, 47,4 en jubilados y pensionados, 63,5 en cuentapropistas y 50,9 en informales. El total de estas cuatro categorías suma un voto consolidado de 52,5”. Por jerarquía, “La Libertad Avanza obtuvo en esas elecciones la preferencia del 52,6 por ciento de los directores y gerentes, el 56,8 de profesionales científicos, el 54,2 de técnicos y pofesionales de nivel medio, el 51,6 del personal de apoyo administrativo, el 58,7 de los trabajadores de servicios y vendedores, el 48,5 de los trabajadores agropecuarios, el 89,4 de los militares y el 52,3 de operadores y otros oficios. En esos segmentos, el promedio le da 52,5 por ciento”. Sergio Massa compensó en trabajadores de enseñanza, sector público e información y comunicaciones.

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