Dos delincuentes armados subieron a robar a bordo de un colectivo de la línea 31, donde pretendían despojar de sus pertenencias al chofer y los pasajeros pero se encontraron con la feroz resistencia de un oficial de la Policía de la Ciudad, que evitó a tiros el asalto en pleno recorrido por la localidad de Villa Diamante.

Minutos más tarde del hecho, un adolescente de 15 años, que sería uno de los ladrones, ingresó herido de bala en el Hospital Evita de Lanús, donde permanece internado, aunque fuera de peligro, con custodia policial.

Fuentes judiciales informaron a Política del Sur que el tiroteo ocurrió el domingo pasado, en Carlos Pellegrini (Camino de la Ribera Sur) y Manuela Pedraza, donde, según describió el agente, que presta servicio en el Anillo de Seguridad Digital de la Policía de la Ciudad y se presentó en la comisaría local, subieron dos sujetos armados.

El policía, que viajaba sentado en los asientos delanteros, cerca del conductor, advirtió la intención de robo de los malvivientes, uno de los cuales amenazó al colectivero al grito de "quedate quieto".

Ante ello, el agente, que estaba de franco de servicio y vestido de civil, les impartió la voz de alto a los sospechosos, extrajo su pistola reglamentaria nueve milímetros, con la que efectuó al menos un disparo para repeler la agresión de los ladrones. De acuerdo a su relato, aportado a la Justicia, uno de ellos le apuntó con un arma.

Los individuos bajaron del transporte y escaparon, pero momentos después, un joven de 15 años llegó, herido de arma de fuego a la altura de la espalda, primero al Centro Piloto de Villa Jardín, desde donde lo trasladaron luego al centro de salud donde fue operado para extraerle el proyectil y cuyo estado de salud era estable. Estaba acompañado de su madre.

Interviene en la causa la UFI 5 del Departamento Judicial de Avellaneda-Lanús, a cargo del fiscal Mariano Leguiza Capristo, que evitó tomar temperamento alguno con el funcionario policial.