Por: Federico Cedarri

El radicalismo avanza presuroso hacia su próxima Convención Nacional que tendría lugar el próximo 12 de junio y donde deberá zanjar las diferencias existentes entre los dos presidenciables de la fuerza que aún no han establecido una estrategia electoral en conjunto y tampoco han determinado quién sería el referente boina blanca que pudiese eventualmente integrar una fórmula híbrida con el PRO.

Morales juega un pleno a la elección del próximo domingo 7 de mayo en Jujuy donde un delfín suyo seguramente lo sucederá en la gobernación, lo que le permitirá relanzarse con fuerza  demostrando músculo político ante sus correligionarios.

El inconveniente que detenta el jujeño es que su alianza primaria con el larretismo lo aisló del resto de los referentes provinciales como el mendocino Alfredo Cornejo y el correntino Gustavo Valdéz, que se acercaron si más remedio al bullrismo, por lo que el gobernador norteño solo cuenta con el soporte sólido de su alianza con Evolución, los seguidores de Martín Lousteau, que lo apuntalan en el ámbito de CABA y la provincia de Buenos Aires.

Se lo puede ver al jujeño rodeado con la claque del economista porteño en todas las bajadas que realiza al territorio bonaerense, donde avisan que el espacio tiene por el momento dos candidatos a gobernador: Martín Tetaz y el alcalde de San Isidro Gustavo Posse.

“Evolución es el futuro del radicalismo, pero todavía no es su momento”, sostiene lacónico un histórico referente partidario a PDS.

En tanto, el oficialismo del partido centenario que encabeza Maximiliano Abad se aprestar a llevar a cabo una demostración de fuerza que tendrá lugar en el microestadio de Lanús el próximo 12 de mayo y que contará con la movilización de los alcaldes bonaerenses que en su mayoría respaldan la candidatura a gobernador del titular partidario.

El radicalismo provincial opera como un eslabón perdido en la órbita centenaria, ya que es el único enclave considerable que sostiene aún el apoyo a la candidatura de Facundo Manes.

El neurólogo trata de apaciguar las dudas de los jefes comunales, que ya solícitos le habrían ofrecido la estructura de fiscales en sus distritos a Patricia Bullrich, asegurándoles que participará de la contienda electoral y que será candidato a presidente representando al partido en la Paso de agosto.

De hecho, en los últimos días intentó mostrar certidumbre económica al anunciar a la economista Marina Dal Poggetto como una de sus arquitectas en la materia que se agregará al trabajo mancomunado que ya ejercitan los equipos técnicos del resto de los postulantes de la alianza opositora.

Pero puertas adentro los interrogantes persisten en los intendentes radicales, comparten la preocupación con sus aliados del PRO de que es necesario una lista única para enfrentar con posibilidades de éxito al peronismo en la provincia de Buenos Aires.

“El kirchnerismo sabe que la nacional la tiene muy compleja por eso pondrá toda la carne en el asador en la provincia y ahí es donde no podemos tan verdes”, explica a PDS un legislador provincial ligado a los alcaldes.

Abad también propugna la conformación de un binomio único en la provincia  en consonancia con el pedido estruendoso que padece a diario de los intendentes que se encuentran enrolados tras su candidatura.

Como anticipó PDS, el marplatense habría sido tentado hace un tiempo por el bullrismo con una propuesta que lo dejó tecleando: la posibilidad de ser el candidato a gobernador de la Piba secundado por un alcalde del conurbano como Néstor Grindetti.

Si bien el titular radical estaría entusiasmado con el aparente convite de la ex ministra de Seguridad, algunos importante dirigentes partidarios lo habrían persuadido de que parara la pelota y meditará: “No es tanto lo que proponen, si perdemos el PRO se queda con puestos en la legislatura y nosotros con nada”, presupuestan.. 

El radicalismo también hace hincapié en el fenómeno Milei

Con las encuestas en la mano que muestran un importante avance del libertario en el ámbito bonaerense, el abadismo urge  a sus socios amarillos a sentarse en rededor de una mesa y apurar la conformación de una fórmula única: “Si en la PASO vamos con dos binomios terminaremos individualmente a muchos puntos de Kicillof y hasta quizás nos supere el candidato de Milei por el arrastre”, sostiene con preocupación otro legislador boina blanca a  este portal.

El abadismo ha vuelto a conversar en las últimas semanas con el sector que responde a Horacio Rodríguez Larreta con quién comparten la preocupación por el internismo que puede terminar entregándole  nuevamente la provincia en bandeja al kirchnerismo.

Si bien el larretismo tiene una sólida alianza con el sector ligado a Gerardo Morales, la provincia de Buenos Aires parece constituir un microclima donde la necesidad de la unidad puede mezclar a las autoridades del Comité Provincia con los referentes que responden al Jefe de Gobierno porteño.

También se menciona en círculos centenarios la posibilidad de que el radicalismo continúe manejando el bloque en diputados en la Legislatura y acepte la candidatura a la vicegobernación detrás de Diego Santilli, que es el candidato con mejor intención de voto.

¿Podría  ser Facundo Manes quién acompañe al Colo como una forma de consolidar la alianza con los alcaldes radicales?, una pregunta que por ahora no tiene respuesta y contribuye a acrecentar interrogantes en el juego correligionario.