El Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 7 de Lomas de Zamora absolvió por unanimidad a Carina Medina, la enfermera juzgada por matar a su cuñado durante un hecho ocurrido en Villa Rita en 2019, al considerar que actuó en legítima defensa.

La decisión unánime de absolverla de parte de los jueces Santiago Márquez, Elisa López Moyano y Roberto Conti, se basó en la situación de violencia que el fallecido habría ejercido a su pareja y a su hija (hermana y sobrina de Carina, respectivamente) y a las amenazas de muerte que el hombre había hecho el día del crimen.

Durante las audiencias probatorias del juicio, la abogada defensora, María Hermida Leyenda, logró demostrar que el disparo fue una "legítima defensa de sí y de terceros" y de esta manera, tras obtener el fallo favorable, Medina recuperará la libertad de manera total después de tres años y dejará de tener arresto domiciliario.

"Las denuncias por violencia de género no se toman"

En diálogo con el programa Política del Sur, la letrada sostuvo la inocencia de su defendida y relató las reiteradas situaciones de violencia que habría padecido la mujer y el resto de las integrantes de su familia. "Esto ocurrió en Villa Rita en Lomas, pero en ese barrio, las denuncias por violencia de género sinceramente no se toman", afirmó.

"En realidad la víctima directa era su hermana, porque estaba en pareja con Quiroga. Cuando él estaba detenido, vivía un tipo de violencia, pero con la tranquilidad de que no iba a pesar a mayores desde lo verbal", contó.

Sin embargo, la pesadilla habría empeorado cuando el hombre recuperó la libertad. "Cuando sale, comienza a ejercer violencia para con Vanesa, en donde estaba presente el arma en todas las situaciones. Luego, en 2019, empieza a tener violencia a todas las mujeres de su familia. Siempre con armas. Hasta que un día Vanesa se cansa", aseguró Hermida Leyenda.

"Cansada, Vanesa se va a vivir con su madre. Ahí es donde empiezan a vivir más violencia. Ella contaba que temía por la vida de su madre. Era cierta la posibilidad de un femicidio. Así las cosas se toma contra su hermana Carina, la atropella con el auto", agregó.

Carina Medina trabajaba como enfermera cuando su familia le avisó que su cuñado Adrián Quiroga había llegado a la casa y amenazaba con matarlos a todos. La mujer fue hasta el lugar y efectivamente se encontró con el sujeto en una situación violenta.

El homicidio ocurrió en octubre de 2019 en Timoteo Gordillo al 2600, en el barrio Villa Rita, donde la enfermera buscó el arma legal de su marido e intentó amedrentar a Quiroga, pero todo se salió de control cuando él habría hecho un gesto de sacar un arma: Carina disparó y terminó hiriéndolo de muerte.

"Les decía (Quiroga) que iba a matarlas a las 19 horas. Carina lo amenazó con un arma y en esa situación él hace un movimiento cómo que iba a sacar un arma. Él siempre estaba armado, según los mismos testigos", precisó la abogada sobre el momento del hecho.

Medina sostuvo que no había tenido intención de disparar y que lo hizo para defender su integridad física, la de su madre, la de su hermana y la de su hija.

La fiscal Marcela Dimundo había solicitado una pena de 13 años y dos meses de prisión, pero los jueces del TOC 7 entendieron que disparó en legítima defensa y la absolvieron.