Por: Federico Cedarri

Ante la vorágine política producto de los acontecimientos recientes, el radicalismo delimita estrategias con la idea de abordar el proceso electoral del año 2023 con una candidatura solidificada que pueda enfrentar con posibilidades de éxito al PRO.

En ese sentido y como anticipamos desde PDS, los centenarios marcarán la agenda de los próximos meses con la irrupción de un ramillete de potenciales aspirantes a la gobernación que saldrán a la cancha plenamente en agosto y levantarán el perfil con declaraciones altisonantes.

La presencia pública de los descendientes de Alem buscará consolidar la posición partidaria en el tablero político bonaerense, para posteriormente con encuestas en la mano decidir hacia fines del año en curso como se conforma la oferta electoral para pulsear con los amarillos en las PASO.

Los correligionarios sintieron que era necesario dar una muestra de carácter y no seguir aguardando vanamente la aparición de un tapado al estilo de lo que representó la irrupción de Facundo Manes en 2021, entendían que la ventaja comparativa del PRO con tres candidatos competitivos en la cancha generaba la necesidad imprescindible de equiparar la ecuación.

Esta palmariamente demostrado que los principales candidatos boina blanca no pertenecen al espacio oficialista que ganó la interna en marzo de 2021, sino que más bien encuentra sustento en los sectores que enfrentaron a la actual conducción.

De hecho Martín Tetaz no bajó la guardia de su postulación y continúa con sus recorridas, fundamentalmente concentrado en el Gran Buenos Aires, y plenamente consciente de que allí radica la debilidad intrínseca del radicalismo y busca revertirlo con la suma de extrapartidarios que puedan provenir de estratos justicialistas disconformes con el kirchnerismo.

Cabe destacar como dato saliente que Tetaz sugestivamente no participó del almuerzo en el que los distintos sectores del partido celebraron en La Plata la designación de Gastón Manes como presidente de la Convención Nacional.

Por otro lado se encuentra el ya lanzado Gustavo Posse, el alcalde de San Isidro ha tomado distancia prudencial en los últimos meses de Diego Santilli a quien acompañó en las PASO 2021, y ha ensayado un tenue acercamiento con la conducción partidaria de Maxi Abad.

Según pudo saber este portal, los dos contendientes de la interna partidaria concretaron un larga conversación que les habría permitido distender los ánimos, limar asperezas y terminar de acercar definitivamente a Posse a la estructura partidaria.

El sanisidrense endureció súbitamente su postura frente a los amarillos y llamó a los correligionarios a no convertirse nuevamente en amanuenses del espacio que fundó Mauricio Macri.

El oficialismo radical siembra candidatos

El principal aspirante que enarbola la conducción partidaria provincial es su conductor, el marplatense Maxi Abad, que levantó el perfil en los últimos días y se encontró con distintos referentes de la alianza opositora

De hecho, se mostró con Ricardo López Murphy y con el candidato a gobernador por el PRO Cristian Ritondo, con quienes adujo haber conversado sobre los planes coordinados que las distintas fuerzas tienen que esbozar para un hipotético triunfo en la provincia.

Sienten los socios de Juntos que no puede volver a sucederles la eventualidad de 2015, que los sorprendió sin estructura suficiente para ocupar los espacios en la burocracia bonaerense y debieron suplir esa falencia importando funcionarios del gobierno de CABA.

Otra de las postulantes que salió a patear la calle es la diputada provincial Alejandra Lorden, de profusa trayectoria en el radicalismo bonaerense y quien tiene a su cargo los hilos de la Fundación Pensar que coordina los equipos técnicos del partido centenario.

Lorden actúa en tándem con la diputada nacional bahiense Karina Banfi, que también suma porotos para una eventual candidatura a gobernadora.

De hecho, en la semana precedente ambas estuvieron en Jujuy invitadas por el presidente del Comité Nacional y gobernador de la provincia norteña, Gerardo Morales.

Otra de las potenciales candidatas que se encuentra en las gateras y pronta a comenzar a caminar la provincia es la senadora provincial y vicepresidenta del radicalismo bonaerense, la ex intendenta de Gral Arenales Erica Revilla.

Por último, se menciona como una firme posibilidad a quién comanda la liga de alcaldes radicales, el jefe comunal de Trenque Lauquen Miguel Fernández, que mantiene una relación tirante con la administración de Kicillof.

En rigor, en los próximos días los intendentes recalarán en La Plata donde sostendrán un encuentro de trabajo para elaborar un temario de peticiones urgentes que plantearán al gobierno bonaerense.

Mientras los correligionarios bonaerenses dirimen estas cuestiones que atañen a la gobernabilidad de sus distritos, la estructura territorial del radicalismo continúa abroquelada tras la candidatura presidencial de Facundo Manes que también recala proselitistamente en el primer cordón del conurbano con desembarcos cada vez más frecuentes a La Matanza.

El neurocientífico despliega sus recorridas por el país bajo el sello de Empatía, un movimiento que aspira a engordar con expresiones alejadas de la política tradicional.