Por: Federico Cedarri

El Senado bonaerense constituye sin lugar a discusión el talón de Aquiles para la gestión del gobernador Axel Kicillof, es que la mayoría que ostenta Juntos por el Cambio en la Cámara Alta hace que tal bancada exija abrir el juego de las discusiones en todo lo concerniente a los pliegos de jueces, directores del Banco Provincia, Defensor del Pueblo, organismos de contralor y autorización para la designación de quién se encuentre a cargo de la Dirección de Cultura y Educación.

Esta situación empodera a la fuerza opositora en su posicionamiento político dentro del tablero bonaerense. Es por este motivo que el peronismo desplegará ímprobos esfuerzos en intentar equilibrar la balanza en ese ámbito legislativo, y las elecciones legislativas adquieren ribetes que encarnan un desafío trascendental para retomar la iniciativa en la Cámara Alta.

Las secciones electorales que deben elegir los escaños a renovar este año, salvo la primera donde el Frente de Todos conserva un caudal de votos apreciable preponderantemente en los distritos del oeste del Gran Buenos Aires, se presentan escenarios en principio dificultosos en materia electoral debido a que son municipios donde gobierna Juntos por el Cambio y el humor social no viene acompañando al oficialismo que viene sufriendo traspiés elección tras elección.

En la primera sección electoral, el oficialismo considera que está centrada una parte importante de la suerte de la futura composición del Senado, es que el elenco peronista aspira a conseguir en estos distritos  una importante cosecha de votos, que les permitan birlar unas cuantas bancas al cambiemismo.

En este conglomerado de municipios intentará renovar su banca Gustavo Soos que responde al alcalde Merlo, Gustavo Menéndez, y que tiene los boletos para integrar los primeros lugares de la lista seccional, habrá que ver qué sucede con la banca que hoy ocupa Marta Pérez, la esposa del intendente de Hurlinghan Albero Descalzo, que en su momento reemplazó a la ministra de gobierno Teresa García, por lo que  se deberá dilucidar si la funcionaria de Kicillof coloca a alguien de su confianza en ese casillero o continúa la actual legisladora. Se menciona al referente del peronismo de San Isidro Federico Gelay, que reporta a la titular de Gobierno, como una posibilidad concreta.

También se menciona la incidencia que tendrá Máximo Kirchner en el intento por colar candidatos en los primeros lugares y adquiere preeminencia el dirigente camporista  de Tres de Febrero, Juan Debandi  como una sugerencia concreta del Diputado nacional en un lugar a salir en la lista.

También habrá que sumar al juego de las especulaciones al Frente Renovador que en 2017 estaba separado de la actual estructura del peronismo, y pese a haber cobrado bien en las legislativas del 19 también quiere meter la cuchara por lo que titular de la Cámara de Diputados nacional, Sergio Massa,  buscará subir a los primeros cinco lugares a su cuñado, Sebastián Galmarini, para auspiciar su retorno al ruedo legislativo.

En la séptima sección se presenta con diagnóstico desfavorable para el oficialismo ya que las tres bancas en juego las tiene el cambiemismo.

La estrategia apuntará a colocar en los lugares a salir dirigentes con territorio  procedentes de  Olavarría y Azul, los dos grandes distritos de la sección,  que permitan traccionar la mayor cantidad de votos para el molino peronista.

Trascendió que el futuro titular del PJ bonaerense, Máximo Kirchner, pretende que Nelson Sombra, un referente de La Cámpora de Azul pueda estar en los primeros lugares. El dirigente actualmente maneja los destinos del PAMI local, uno de los bastiones preponderantes de la agrupación juvenil del peronismo.

También en Olavarría talla fuerte La Cámpora, de la mano del diputado provincial César Valicente adquiere preponderancia el subsecretario de Minería de la provincia, Federico Aguilera, con fuertes chances de estar en los primeros tres lugares.

Otra sección electoral hostil para las apetencias del peronismo lo constituye la cuarta, aquí se descuenta que Gustavo Traverso y María Elena Defunchio, de buenos vínculos con Cristina y Máximo intentarán renovar su banca.

Asoman con chances de meterse en la discusión en los siguientes lugares: el albertista de Bragado Darío Duretti  y la juninense Victoria Muffarotto, perteneciente al círculo político del ex ministro de Transporte recientemente fallecido, Mario Meoni.

Por último, queda el análisis de la quinta sección con importantes falencias para el esquema oficialista, debido a que sólo reporta cinco bancas a la Cámara Alta, tres por la mayoría y dos por la minoría, y se presenta como un eslabón de municipios muy amplio, pero con la preponderancia de dos ciudades con carácter demográfico determinante, Tandil y Mar del Plata, y vaya paradoja, las dos posesión de Juntos por el Cambio.

Ante ese escenario, se presume que Gervasio Bozzano, líder del bloque del Frente de Todos en el Senado y dirigente de La Cámpora, con lazos promisorios con Máximo Kirchner, encabezará la boleta y también tendrá su lugar la representante de La Costa, la dejesuista Gabriel Demaría.

La titular de Anses, la marplatense Fernanda Raverta, también asumirá  un fuerte protagonismo en esta sección y avalaría a Juan Manuel Cheppi, funcionario en el Congreso Nacional y cercano además al líder del Frente Renovador,  Sergio Massa. Sin embargo no habría que descartar al dolorense y camporista Juan Pablo García, hijo del histórico dirigente ligado al kirchnerismo Daniel Pata García, ni tampoco desechar al felipista tandilense Martín Yañez.

Así las cosas,  la escenografía ya está planteada y falta dilucidar los actores que emprenderán la representación del peronismo en estas secciones electorales en las que se apunta a desatar el nudo gordiano de la gobernabilidad en los próximos dos años,  debido a la importancia sustantiva que despierta la futura composición del Senado bonaerense en los planes del gobierno de Axel Kicillof.