Ocurrió la semana pasada, pero trascendió en las últimas horas. Se trata de un aberrante caso de abuso sexual cometido en la localidad de Malvinas Argentinas contra un chico de 15 años con retraso madurativo sometido al sadismo de un vecino del barrio. Un jubilado con antecedentes por hechos similares que lo amenazó en la calle con un machete y lo obligó a ir a su casa para satisfacer sus deseos perversos. 

El degenerado, identificado como Bernardo Tevez, de 68 años, permanece tras las rejas desde el 19 de marzo pasado por los delitos de abuso sexual con acceso carnal, amenazas y resistencia a la autoridad. Fuentes cercanas a la investigación confiaron a Política del Sur que el hombre cuenta con un amplio prontuario delictivo por otras violaciones, lo que complicó todavía más su situación procesal.

El día de su detención, Tevez fue sorprendido en la cama con la víctima, quien pidió auxilio a los gritos al ver ingresar en la propiedad a los efectivos del Comando de Patrullas del partido de Almirante Brown que acudieron a salvar al menor.

Según indicaron a este medio, fue la propia hija del abusador que paró un patrullero de la Policía luego de llamar al 911. La mujer contó que vio ingresar a la casa a su padre junto a un adolescente "con actitud sospechosa". La desconfianza era a raíz del pasado oscuro de su padre y no dudó en manifestarselo a los agentes.

El allanamiento de urgencia fue realizado en una humilde vivienda ubicada sobre la calle Laurel, entre Algarrobo y Pino. El joven rescatado expresó entre lagrimas a los uniformados que había sido abusado por el sospechoso. Lo capturó en la calle y lo llevó a su casa por medio de amenazas con un machete.

Tras escuchar el cruel relato, el jubilado, que ya se encontraba esposado, fue llevado inmadiatamente hasta la dependendencia policial local para evitar un linchamiento vecinal que le podía costar incluso la vida por el grado de indignación y sed de venganza de vecinos justicieros que preferían hacer justicia por mano propia.

Entre sus pertencias, hallaron el elemento utilizado para intimidar a su víctima y llevarla en contra de su voluntad. Un machete que continúa incautado como una de las pruebas fundamentales en la causa llevada adelante por la UFI 9, especializada en delitos sexuales del Departamento Judicial de Lomas de Zamora.