La Federación Argentina de Empleados de Comercio y Servicios (Faecys), encabezada por su secretario general, Armando Cavalieri, informó ayer que se “continúa avanzando en una mesa de diálogo con las cámaras empresarias del sector y el Ministerio de Trabajo de la Nación, con el fin de encaminar las paritarias correspondientes al año en curso”.

Cavalieri destacó que “el gremio está compuesto en su mayoría por trabajadores y trabajadoras que desempeñan sus tareas en pymes, que sin duda fue uno de los sectores más afectados desde que comenzó la emergencia sanitaria por Covid-19”.

El secretario general del Comercio aseguró que “en este contexto económico desfavorable por el que nos toca atravesar, nos encontramos en un momento trascendental que implica tener la responsabilidad de llevar adelante una negociación en defensa del salario de los/as compañeros y compañeras, defender su poder adquisitivo y garantizar un escenario que permita sostener la estabilidad y continuidad del empleo”.

Cavalieri resaltó “el rol esencial que han cumplido trabajadores/as de comercio del sector alimentario para asegurar en la pandemia el abastecimiento y la provisión de artículos de primera necesidad, esfuerzo que tuvo el acompañamiento del sindicato, al lograr que se reconociera con un bono de entre 5 mil y 6 mil pesos, según los casos”.

Por último, desde la Federación se subrayó que “continuaremos el diálogo abierto con todos los sectores intervinientes para alcanzar un acuerdo paritario que permita recomponer el poder adquisitivo y en acompañamiento de una reactivación económica del sector”.

La semana pasada, sectores que no están alineados con la conducción de Cavalieri realizaron una marcha, para pedir que se reabra a la discusión salarial. Esto fue duramente criticado por el veterano dirigente, que lo vinculó a “intereses políticos”. Los dardos apuntan a Ramón Muerza, quien supo ser el principal contendiente de Cavalieri entre los mercantiles. Es que el dirigente, en las últimas horas, buscó atribuirse la movilización que la semana pasada colmó el frente del Sindicato de Empleados de Comercio y sus exaliados le salieron al cruce.

En concreto, la agrupación La Voz de Comercio salió a responder. No sólo desmintió el liderazgo de Muerza, sino que negó su participación en la actividad. “Reclamamos la reapertura de paritarias a través de otras acciones llevadas adelante en nuestras tiendas”, especifica el comunicado de prensa, y lanza un tiro todavía más contundente desautorizando a Muerza como articulador: “Las acciones que puedan ser tomadas para continuar nuestra lucha por la recomposición salarial van a ser informadas por nosotros mismos”, manifiesta.