Por: Federico Cedarri

El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, instruyó a los titulares de ambas cámaras legislativas y a los presidentes de los bloques del Frente de Todos, Gervasio Bozzano y Facundo Tignanelli, para que apuren la autorización de endeudamiento que solicitó su gobierno para cancelar deudas y afrontar consecuencias de la pandemia de coronavirus.

Solícito, el presidente de la Cámara de Diputados de la provincia de Buenos Aires, Federico Otermín, oficializó la convocatoria para sesionar este jueves a las 15, en tanto que la vicegobernadora, Verónica Magario, haría lo propio si se encuentran los consensos necesarios.

Cabe recordar que la Cámara Alta representa el principal obstáculo para los planes de Kicillof, debido a la mayoría que ostenta Juntos por el Cambio, lo cual obliga al oficialismo a negociar sin más un entendimiento.

Cuentan que la intención del Gobernador es ponerle el moño este jueves, con un veloz paso legislativo, al pedido de endeudamiento por 500 millones de dólares con organismos multilaterales y bilaterales de crédito.

Los intentos por rematar las negociaciones sorprendieron a gran parte de los actores parlamentarios, toda vez que la falta de acuerdos para la reestructuración de las deudas nacional y provincial condiciona la intención de salir a buscar liquidez y recursos.

Sobre la mesa aparecen varios frentes de negociación a saldar: el destino de los fondos que irán a parar a los 135 intendentes, la devolución del auxilio económico que giró la Provincia a los municipios, hasta acuerdos de funcionamiento para ambas cámaras, y sobrevuela la demora en el reparto de los cargos de contralor que pide resolver Juntos por el Cambio.

En agosto, los intendentes tienen que empezar a devolver la plata girada por el gobierno bonaerense. Sobre este punto, todos los bloques opositores cerraron filas en el pedido para reponer esa plata en cuotas cuando termine la pandemia.

En esa línea, la iniciativa de Kicillof plantea modificar “los cronogramas de devolución previstos” del Fondo Especial de Emergencia Sanitaria para la Contención Fiscal Municipal, que podrán extenderse hasta 18 meses contados desde el momento de la percepción de las partidas.

El texto que giró el Gobernador también busca el respaldo legislativo para la emisión de un bono para proveedores por 20 mil millones de pesos, dentro de los cuales se encuentran, entre otros, los de salud. En Gobernación atribuyen esa necesidad a la deuda “heredada”.

En tanto, una fuente de financiamiento que contempla el proyecto es la autorización de la ampliación por hasta 8.000 millones de pesos para la emisión de Letras del Tesoro bonaerense, la única herramienta de financiamiento en el mercado local que viene utilizando la Provincia.

Vale recordar que hace dos semanas Kicillof envió de manera virtual al ministro de Hacienda y Finanzas bonaerense, Pablo López, a defender ante la Comisión de Presupuesto de la Cámara de Diputados, que comanda el oficialista Juan Pablo de Jesús, el proyecto de endeudamiento. 

En tanto, el titular del bloque de Juntos por el Cambio en el Senado, Roberto Costa, que junto a Maximiliano Abad es el encargado de llevar las riendas de las negociaciones del bloque opositor mayoritario, adelantó que se desenvuelven por estas horas charlas cruciales con intendentes cambiemistas con el propósito de afinar el lápiz en lo concerniente a la petición que le elevarán a la Provincia en lo referente al destino  de esos fondos. “Buscamos una salida armoniosa y por consenso a ese dinero”, ratificó.

En rigor, desde el espacio opositor cuestionan con severidad que la Provincia disponga libremente los fondos ATN (Aportes del Tesoro Nacional) que le envía el gobierno de Alberto Fernández, y que, asimismo, tampoco tenga que reintegrar ese dinero a la Nación, mientras a los municipios se los conmina a realizar la devolución de aquellos fondos que la Provincia distribuyó.

Contemporizadores, exigen que cada contribución, préstamo, o donación que obtenga la Provincia de entes internacionales sea coparticipado automáticamente a los municipios con un criterio de distribución del 16,14 por ciento, y que tales fondos estén eximidos de devolución durante el transcurso de la pandemia.

Puntualmente, en estos criterios descansan las diferencias entre las fuerzas legislativas: “Si atienden estas exigencias ahora, votamos el jueves el endeudamiento, caso contrario, seguiremos conversando con espíritu constructivo y será refrendado más adelante”, señaló a este medio un conspicuo referente parlamentario del espacio opositor en el Senado.