Familiares de Marcelo Blanco, un joven de 20 años asesinado a balazos en un confuso hecho ocurrido durante la madrugada del 2 de julio en Villa Fiorito, reclaman la detención de los acusados y denuncian que son amenazados. 

“La Policía sabe quiénes son los asesinos, pero no hace nada. Siguen libres y encima amenazan por teléfono a la familia, que tiene miedo porque son transas”, confió a Política del Sur alguien del entorno cercano de la víctima que prefirió preservar su nombre por miedo a posibles represalias de parte de los acusados, que serían personas del mismo barrio conocidas por vender paco en la zona. 

Según precisaron, Marcelo Blanco habría ido junto a dos amigos a comprar droga en la esquina de General Paz y Australia, cuando fueron sorprendidos por al menos tres personas que los atacaron a balazos. Marcelo recibió dos impactos de bala en el tórax que le provocaron la muerte, mientras que los amigos lograron escapar, al igual que los agresores. 

Aparentemente, el móvil del crimen habría sido una pelea previa entre los acompañantes del joven asesinado (que no sabía del conflicto) y los atacantes, que permanecen libres. 

La causa, que permanece sin detenidos, fue caratulada como “homicidio” por la UFI 1 del Departamento Judicial de Lomas de Zamora, que está a cargo de la investigación.