viernes 29 de marzo de 2024 - Edición Nº1941

Otros | 24 jun 2020

RECUERDO DEL ASCENSO TRICOLOR 2013

José Pablo Burtovoy: “Ese ascenso fue muy importante para mí”

El arquero héroe de Brown de Adrogué recordó el ascenso de 2013, a siete años de la hazaña en cancha de Almagro. Cómo vivió los penales, por qué lograron el ascenso y muchas cosas más, en la nota.


Desde 2013 que los 22 de junio no son un día más en la vida de Brown de Adrogué. Aquella tarde, donde José Pablo Burtovoy se hizo héroe en José Ingenieros ante Almagro atajando tres penales. El Tricolor logró el primer ascenso al Nacional B de toda su historia, lo que le permitió elevar la vara de la institución, que hace cinco años se mantiene en la categoría.

Deportes del Sur dialogó en exclusiva con el héroe de aquella tarde, que recordó cómo vivió todo el proceso de meterse en el reducido, la semifinal y la final de aquel campeonato de 2013.

- ¿Qué se te cruza por la cabeza cada 22 de junio?

- Siempre se vive con mucha alegría, con mucha emoción, procurando visualizar el todo más que la acción puntual del último juego. Era la etapa final de mi carrera, y en esa etapa los futbolistas tienen un rol mucho más amplio que el sólo jugar. Ese rol es clave, pero hay muchas más cosas que los futbolistas con más recorrido tienen el deber de transmitir y compartir con las instituciones y los compañeros a los que les toca compartir los desafíos.

- ¿Cómo recordás aquel campeonato?

- Yo recuerdo el inicio de todo eso. Cuando Brown me dio la oportunidad de representar a la institución, hice el repaso de las actuaciones del equipo en los últimos años, había tenido actuaciones extraordinarias, había muy poco margen de mejorar, y el margen que había era ser finalista o ganar la temporada. Desde la firma del contrato empezamos a visualizarlo con los compañeros en la pretemporada. Es importante visualizar el todo porque todos son importantes en esta construcción, sobre todo cuando se logra algo así. La competición se fue dando con actuaciones muy buenas y contundentes contra los equipos con mayor historia. Y tuvimos algunos altibajos con algunos equipos que a priori teníamos que vencer. Teníamos una oportunidad muy grande en el partido ante Armenio para cerrar la clasificación y no lo pudimos hacer. Eso nos llevó a la instancia límite, a tener que ganar en cancha de Temperley para clasificar al reducido en el que ganamos sobre el final.

- ¿Cómo viviste la final?

- Fue algo de mucha tensión, no es fácil. Tuvimos algunos minutos donde tuvimos que replantearnos situaciones y poder salir fortalecidos de cada una de ellas. En el primer tiempo la serie ya estaba igualada, y ni bien igualaron, tuvieron el tercero, pero el delantero le erró al arco. Tuvimos que empezar a jugar otro partido y entender que ya estábamos cero a cero nuevamente, había que entender que cualquier situación era un estado de angustia importante. Tuvimos que alinearnos y volver a enfocarnos en el juego, jugar el partido mano a mano hasta el final. Inclusive nos anularon un gol de mala manera, con un error muy grosero del árbitro. A eso también nos recuperamos y nos mantuvimos con mucha fuerza hasta que terminó. Teníamos una ventaja de dos penales, pero la serie volvió a estar igualada. Hay una foto en la que todo el equipo está en el centro del campo de juego de rodillas y eso refleja lo que fue el equipo. Salió muy fortalecido durante todo el año, esa es una foto muy significativa.

- Te tocó enfrentarte con un amigo como Richard Schunke en los penales, ¿no?

- Con Richard compartíamos un espacio de aprendizaje de la palabra de Dios. Cuando empezamos la definición, vi que se puso para patear teniendo 19 años y no podía creerlo. Habiendo otros muchachos, le tocó patear a él ese penal y fue una tristeza que haya tenido que errar. No fue una situación muy grata para mí. Hace poquito le tocó salir campeón de la Copa Sudamericana y le volví a hablar. Fue muy bueno que haya tenido ese hermoso premio.

- ¿Qué tenía ese equipo?

- Lo más importante era la gran convivencia que tenía ese plantel. Era un plantel que venía conformado hace unos años y después los jugadores encargados de liderar dentro del campo los distintos espacios lo han hecho muy bien. Hay una cosa muy importante del juego, que es que teníamos mucho gol, nuestra zona de finalización era muy fuerte, con un promedio de gol altísimo. Todo eso, acompañado por un lugar en el que hay un entrenador que confía en los experimentados, hay un profe que solventa un montón de situaciones dentro del club, estructurales y sociales, eso es muy importante, y tenés algo muy importante, que es que la directiva hacía que las cosas que se pactaban se cumplieran de forma perfecta. Todas esas cosas son importantes para el jugador. Todos contribuyen al éxito. Brown es autóctono, es parte de la amplitud de nuestro fútbol profesional y no hay que desconocer el éxito que hubo. Es un lugar donde no tenés excusas para no ser un mejor futbolista, independientemente de la edad o de otras cosas. Tenemos todo para entrenarnos y mejorar como jugadores.

- ¿Cual fue la importancia de Vicó?

- Yo marco dos situaciones muy positivas de Pablo, donde el fútbol tiende a tener una sobreinformación o un exceso de tecnología, que son cosas buenas, pero cuando están articuladas con el conocimiento del fútbol. Pablo tiene una gran virtud, que es que cuando elige quiénes van a liderar el equipo, acierta mucho. Respalda a esos futbolistas durante toda la temporada y esos futbolistas responden, eso es un gran don de un entrenador.

- ¿Dónde ubicás este logro en tu extensa carrera?

- Este ascenso fue importantísimo para mí. Una de las cosas que planteé era que había que hacer foco en ser mejores futbolistas. El ascenso a veces genera muchas limitaciones mentales. En los últimos cinco años de mi carrera me tocó jugar en el ascenso y tuve un aprendizaje muy grande. Veía compañeros con más cualidades técnicas y físicas que yo, y me planteé que tenía que ir por todo, por lo maravilloso que tiene el fútbol. Empezamos a trabajar en eso con los muchachos, en donde teníamos una institución que te brinda todo lo que vos necesitás para poder trabajar correctamente. Era una decisión personal y grupal poder llevar el fútbol a la máxima expresión, y que eso replique en que cada uno de los muchachos pueda darle lo máximo a su familia. Me enorgullece que un lugar en absoluto silencio, fuera de las luces y de cuestiones banales, generó lo que generó. Para coronar esto, fue la manifestación de la ciudad, del pueblo. Todas estas cosas pasan cuando los futbolistas, el cuerpo técnico y la Comisión Directiva visualizan lograr lo extraordinario.

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