La madrugada del viernes 23 de abril, Victoria Sequeira, una vecina de la localidad de Ingeniero Budge y madre de dos hijos de 8 y 2 años, se despertó al escuchar el ruido generado por una lluvia repentina. Es que tenía que meter la ropa recién lavada que dejó en el tender para que se secase durante la noche. Sin embargo, lo que pasó en ese momento la tiene en vilo desde entonces. 

En medio de la incipiente tormenta, salió al patio y cuando volvió a entrar, se vio sorprendida ante la presencia de una persona extraña que aprovechó para ingresar a su vivienda con intenciones de robo. Se trata de un joven conocido en el barrio como “Huija”, que no concretó el hurto pero que, tras ser arrestado, amenazó a su víctima, que desde esa fecha teme por ella y sus hijos. 

En diálogo con Política del Sur, Victoria contó detalles de cómo comenzó su calvario y la respuesta que le dieron las autoridades. “Tengo miedo de que lo liberen, pero la Policía sólo me dijo que cierre bien la puerta”, señaló.

Según expresó a este medio, el acusado sería un delincuente de 18 años con varias causas por robo que tiene a maltraer a los vecinos y que estaría involucrado en un intento de homicidio. 

“Cuando lo vi dentro de mi casa, le grité y parecía que buscaba algo para atacarme, pero como no dejo nada en la mesa, salió corriendo. Después salí a la calle a pedir ayuda y lo agarró el padre de mi hija, que vive cerca, junto a los vecinos, cuando estaba robando una moto en la misma cuadra”, indicó la mujer de 30 años, y alertó: “Por suerte no me atacó, pero la Policía me dijo que tenía un pedazo de hierro.” 

Según su relato, antes de entrar a la comisaría, el joven realizó gesticulaciones amenazantes y le dijo “vas a ver cando salga”. “A la Policía también los amenazó y les dijo que salía en tres días. Es un pibe que a los 11 años se escapó de un instituto de menores y desde entonces no paró de robar”, aseguró. 

Consultada por otros hechos de inseguridad en su barrio, afirmó que los robos aumentaron en la zona con la extensión de la cuarentena obligatoria y el cierre de la Feria La Salada. “Hay mucha inseguridad, pero la Policía sólo aparece para amedrentarte si no usás barbijo. Mientras tanto, este pibe y sus hermanos, que pungueban en la Feria, ahora roban acá”, criticó. 

“Según la fiscal, iba a quedar detenido, pero en cualquier momento lo pueden largar. Desde entonces tengo miedo porque no sé qué nos puede hacer”, concluyó.