Su familia llora su pérdida y busca respuestas a la muerte tan insólita como trágica de Jonatan Escande (31), atropellado el 22 de febrero pasado en Llavallol por un vehículo Volkswagen Gol conducido por un hombre de 53 años imputado por “homicidio culposo”, pero que permanece en libertad. 

Según el relato que la novia de la víctima aportó como testigo presencial a los efectivos policiales de la Comisaría 4° de Lomas de Zamora que asistieron a la intersección de Antártida Argentina, entre las calles Polonia y Pareta, el fallecido paseaba a su perra en la vereda cuando encontró la muerte en frente de la entrada de una conocida escuela de la zona. 

En el lugar, los uniformados se encontraron con la triste escena: “Jony”, como le decían sus seres queridos, yacía en el suelo y a su lado, su pareja, quien trataba de reanimarlo, pero sin éxito. Minutos después, falleció en el Hospital Gandulfo a pesar del esfuerzo de los médicos que trataron de salvarle la vida. Se trataba de un estudiante que cursaba el segundo año de la tecnicatura en medicina nuclear en el Hospital Fernández. 

Fuentes policiales indicaron a Política del Sur que el acusado se identificó con el personal policial, que lo trasladó a la seccional local. “Una vez allí, el mencionado se descompensó y fue derivado en ambulancia hacia el Hospital de Llavallol (presuntamente preinfarto)”, precisaron en el informe del caso. 

Por ahora, los familiares damnificados decidieron no hablar con la prensa por recomendación de su abogado. Sin embargo, este medio pudo averiguar que la UFI 10 de los Tribunales de Lomas, a cargo de la fiscal Roxana Podestá, llamó a declarar a varios “testigos claves” para esclarecer lo ocurrido. Además, la Justicia cuenta con varias filmaciones de la escuela Euskal Echea y de locales comerciales que habrían registrado el choque.