Picante y enojado. Así habló Pablo Vicó en los microfónos de Deportes del Sur en la previa de lo que será el duelo por la fecha 8 de la zona 2 de la Primera Nacional ante Villa Dálmine en Campana.

Se lo notó enojado con los insultos de los "hinchas" de Brown de Adrogué hacia el equipo, apuntó al por qué de las cuatro derrotas al hilo, dio detalles de su relación con la Comisión Directiva y hasta habló de los jugadores que se fueron y el plantel armado.

-¿Cómo analizás el empate? ¿Sirve cortar esta racha de derrotas aunque sea con un punto?

Creo que después de once años de que no pierdo cuatro partidos seguidos, sacar un empate me puede servir para levantar el ánimo de los muchachos, ojalá sea el puntapié inicial para que ganen confianza. Yo creo que tengo un buen equipo, pero cuando la pelota pega en el palo y sale, la confianza se empieza a perder.

-¿Corrió peligro tu continuidad? ¿Cómo lo viviste?

- Estuve lejos de pensar en irme de Brown, bajo ningún punto de vista. El día que me quiera ir lo voy a decidir yo, no lo va a decidir otra persona. Además, creo que este cuerpo técnico hizo los méritos necesarios como para que le aguanten diez derrotas seguidas. Quiero creer que por cuatro partidos perdidos no me tengo que ir, pero si me lo dicen agarraré los bolsos y me iré. Aunque creo que el hincha de Brown no lo permitiría.

-¿Creés que hubiese sido lógico que se ponga en duda tu continuidad?

Creo qué hay una coherencia por parte de la Comisión Directiva. ¿Qué técnico puede resolver algo en cuatro partidos? Yo me siento orgulloso de tener el presidente que tengo y la comisión que tengo porque no se movieron jamás de un proyecto que lleva once años. Estoy contento y feliz. Si después de cuatro partidos me tengo que ir, no hay un proyecto, por eso yo siempre sigo en Brown de Adrogué. Si yo elijo 16 jugadores y el presidente me echa a los cuatro partidos, es ilógico, sobre todo porque armo equipos nuevos todos los años y en cinco campeonatos entramos todos al reducido, por eso creo que hay que tener coherencia.

-¿Se te cruzó por la cabeza dar un paso al costado?

Jamás se me paso por la cabeza irme; que haya escuchado comentarios, montones. Nadie se acercó a la mesa chica, eso es lo más importante. ¿Cómo me voy a ir de Brown en donde cobro todos los meses? Yo si me voy, le tengo que devolver plata al presidente. ¿A dónde voy a ir? Si hay equipos que hace cinco, cuatro y tres meses que no cobran. Me tienen que sacar a escobazos de Brown. La relación que hay con Camarero y con Vairo es de la mejor. Ni yo ni me cuerpo técnico pensó en irse de Brown. Si me voy es por la puerta grande, no por la del fondo.

-¿Qué pasaba si perdías con Almagro?

Si me tocaba perder, el lunes iba a hablar con el presidente para preguntarle si seguíamos. Tengo un poco de dignidad y creo que nos ganamos un prestigio que hay que respetar. De todas maneras, el presidente siempre me dio su apoyo y me dijo que  vayamos para adelante.

-¿Qué te generaron los insultos de la gente?

Es complicado, yo no voy a permitir que puteen a los jugadores porque no salen las cosas, yo sé que a mí ni me dicen nada porque me quieren mucho, pero no puedo permitir eso. El que me quiera decir las cosas en la cara lo voy a ver, pero después insultan detrás del Facebook y eso me da bronca, porque ningún jugador entra a un campo de juego a hacer las cosas mal.

-Se te nota muy enojado con las agresiones vía redes sociales. ¿Por qué?

Me da bronca que se escondan detrás de un Facebook y no den la cara, eso quiere decir que son personas que no tienen vergüenza. ¿Qué me pueden decir de Brown de Adrogué a mí? Nosotros hicimos a Brown de Adrogué, le dimos montones de cosas. A veces veo que putean al presidente. ¿Qué le pueden criticar? Si nosotros de la nada hicimos un club importante, jamás hubiesen sabido lo que era jugar con Independiente, Huracán o Banfield y ganarle a la mayoría. Hoy perdés cuatro partidos y ya te putean, pero estoy tranquilo porque no duraron ni un minuto, el verdadero hincha de Brown los calló.

-¿Qué le dirías al hincha de Brown que perdió la paciencia?

Si la gente de Brown pierde la paciencia, tengo cosas para responderle, no me escondo detrás de un Facebook, esos son los cobardes que escriben boludeces y no tienen pelotas para decir las cosas en la cara. No voy a permitir que me puteen a los jugadores, cuando somos Brown de Adrogué y tenemos el presupuesto más bajo de la categoría. Este club es familiar y la gente viene a disfrutar el momento. Hoy las cosas no están saliendo, pero no hay derecho a putear a los jugadores. El que tuvo problemas en su casa, que se quede y no venga. En once años nos tocó perder cuatro partidos seguidos y ya están hablando estupideces. Con dos ascensos y en el Nacional B jamás bajé del quinto puesto, ¿qué más querés? Vinieron a buscarme equipos y siempre puse por delante a a Brown. ¿Quién se creen que son para putearme a mí y al cuerpo técnico?

-¿Por qué creés que no se dan los resultados?

Creo que el declive empezó cuando en el minuto 94 nos gana Santamarina en Tandil, ahí empezo la debacle, los jugadores perdieron confianza. Las distracciones las hemos pagado caro, el jugador no tiene confianza con la pelota como para sostener situaciones. Esto nunca me pasó, pero tengo que seguir trabajando para superar este momento. Darle toda la confianza de los jugadores para que puedan levantar su nivel.

-Todos los años armás planteles nuevos. ¿Por qué creés que en este campeonato no surtió efecto como en los anteriores?

Es la realidad, todos los años nosotros treamos 15, 16 jugadores, y tenemos que armar un equipo permanentemente como para salir a pelear cosas, pero eso puede llevar a fallar a la hora de ensamblar a los jugadores. No es que yo quiero que mis jugadores se vayan, pero el presupuesto de Brown no da como para que haya jugadores que sean base y poder traer cuatro o cinco. Nosotros estamos para recuperar la jerarquía de algunos jugadores que no están pasando un buen momento, y cuando recuperan esa jerarquía, otros clubes se lo llevan. Es muy difícil.

-¿Cómo analizás el armado del plantel con respecto a las salidas y a las llegadas?

Me hubiese gustado traer a jugadores de primera, pero no los puedo traer económicamente. El año pasado estaban enloquecidos con esta defensa, se fue solo Liporace y lo pusimos a Stegman en su posición natural, que es la de tres. Traje a Bonacorso, que es un tipo con experiencia que jugó en Godoy Cruz e Instituto para reemplazar a Zaragoza, pero ahora no les gusta. Y la semana que viene, si no les gustan los delantero, se van a quejar por eso".

-¿Pensás que les está costando tapar el hueco que dejó la salida de Enzo Ortiz?

Yo lo traje a Kippes, que jugó tres finales en el Nacional B, por Ortiz. A Enzo lo quería tener, pero él eligió irse a Barracas, donde no juega nunca, son decisiones de los jugadores. Él tomó la decisión de ir a Barracas, a lo mejor esos cuatro o cinco pesos más le hacen la diferencia para no jugar en Barracas porque tampoco juega ni en Copa Argentina.

-Alexis Vega tampoco está jugando mucho en Temperley.

Lo de Alexis Vega es totalmente diferente porque se le terminó el contrato de seis meses y eligió irse. Quién te dice que no nos podamos volver a cruzar. Si nosotros y ellos clasificamos, ojalá que nos podamos enfrentar.

-¿Cómo analizás la situación de Gastón Grecco, que no ha jugado en todo el torneo?

Grecco es un referente importante, un ídolo del club que eligió poder irse con todos los laureles y bien merecido lo tiene. En algún momento va a tener su oportunidad, viene de una lesión y hoy va a jugar en tercera contra Temperley. Acá son 31 jugadores y todos tienen la posibilidad. El que elige soy yo, pero a lo mejor me puedo equivocar. Cuando lo vea bien o en condiciones, lo pondré. Hay que tener en cuenta que no es lo mismo jugar contra Cañuelas y Argentino de Quilmes que contra Brown de Madryn y Tigre, por eso hay que preparar al jugador.

-¿Qué hay que mejorar de cara a lo que viene analizando el empate ante Almagro?

Me quedé preocupado porque enfrentamos a un equipo que no es superior a nosotros, le generamos ocho situaciones y hasta el último minuto no pudimos convertir. Hay que tratar de mejorar el volumen de juego para que no nos pasen estas cosas. Sabemos que vamos a Campana contra un rival duro, muy difícil, y todo nos va a costar. Lo más importante es que ganen confianza como para poder disputar de igual a igual el resultado. Yo voy a buscar los partidos, y eso es lo que más me interesa.