Luego del derrumbe en una obra en construcción en la terminal “B” del Aeropuerto Internacional de Ezeiza, que dejó como trágico saldo un muerto y al menos siete heridos, el vocero de la Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina (UOCRA), Ricardo Camaño, afirmó que “la obra ya tenía denuncias por incumplimientos en las medidas de seguridad”.

“La obra tenía denuncias por incumplimientos en medidas de seguridad y aparentemente es de una contratista que está trabajando en las ampliaciones de Ezeiza”, aseguró en declaraciones radiales.

El derrumbe arrojó el saldo de un muerto y al menos siete personas heridas. Según el relato de uno de los trabajadores, el operario que murió cayó desde unos 15 metros de altura y detallaron que se sintió una fuerte vibración. Al mismo tiempo, el dirigente aclaró que “la UOCRA no tiene poder de policía laboral. La seccional de Monte Grande, en el partido de Esteban Echeverría, ya había presentado la denuncia ante la delegación de Trabajo del Municipio”.

Por otra parte, uno de los obreros que trabajaba en la obra explicó que “desde hace veinte días las empresas se olvidaron de la seguridad. Antes te exigían todo, ahora se habían borrado las medidas. Había que terminar sí o sí para el lunes porque venía (Mauricio) Macri”, y agregó que “particularmente en la última semana fue todo un desastre, cada vez había menos medidas de seguridad”.

El plazo de la obra contemplaba unos tres meses de trabajo, pero según informaron, desde el Ministerio de Trabajo de la Nación comenzaron a apurar el trabajo de los operarios para terminar al menos una parte este domingo, con motivo de una visita del presidente Macri previsto para el próximo lunes.

Otro de los obreros contó cómo se vivió el momento de la caída del andamio, que al parecer fue chocado por una de las máquinas que se operaban allí. “Hubo un silencio estremecedor y luego se desató el caos. Son compañeros que uno ve todos los días, que los cruzás, que los saludás y hasta a veces compartís alguna que otra charla. La gente empezó a correr, a agarrarse la cabeza, nunca vi algo igual”, comentó Marcelo.

Y agregó: “Ahí arriba había quince personas armando la estructura, y sé que me podría haber tocado a mí. Esto es una absoluta negligencia. Le quieren echar la culpa al accionar de un operario, pero las tuercas acá están ajustadas con la mano. No te dan tiempo a hacer nada rebuscado porque te apuran para que termines antes de las elecciones. Este chico no murió en el baile ni yéndose de joda, murió trabajando, a las corridas, como lo hacemos todos. Lo lamento mucho por su familia.”

Según datos oficiales, una grúa de las denominadas “tijera” enganchó a la estructura tubular, de 16 metros, y la hizo caer. Sin embargo, los trabajadores acusaron a las autoridades de “apurarlos para terminar antes de las elecciones”.