

Tras varias semanas de negociación, el gobierno nacional confirmó que acordó con sindicatos y empresarios el pago de una suma fija de 5.000 pesos no remunerativa para los trabajadores del sector privado. Según informaron desde el Ministerio de Producción y Trabajo, el “bono” se pagará a cuenta de las próximas paritarias para los trabajadores del sector privado, lo que generó polémica porque en muchos casos se habilitaron las cuotas como forma de afrontarlo.
Luego de la reunión que mantuvieron funcionarios nacionales con empresarios y representantes de la CGT, se anunció la norma que habilitaría “la suma fija no remunerativa”, que comenzaron a hablar sobre todo empresarios industriales en estos días. De todas maneras, la normativa no está terminada, pero existe un consenso entre las partes.
El presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), Miguel Acevedo, dio su apreciación del “bono”: “Hay cuestiones a definir sobre la forma de pago, en el marco de los convenios colectivos de cada actividad”, explicó, y agregó que van a “arreglar las modalidades de pago para que el bono también pueda ser afrontado por las pymes”.
“Es obligatorio para todos los trabajadores de la actividad privada”, señaló el secretario de Prensa y Comunicación de la CGT, Jorge Sola. “Es un consenso y sirve para recomponer el poder adquisitivo después de las variables inflacionarias que estamos viviendo”, indicó. “Hemos encontrado por parte del Gobierno y del sector empresario la comprensión de poder cambiar el poder adquisitivo para volcarlo al consumo”, añadió.
Por su parte, desde la Cámara Argentina de la Mediana Empresa (CAME) aseguraron que “no se firmó un bono”, sino que “se acordó una recomposición salarial”. Remarcaron que “se trata de un aporte obligatorio de cinco mil pesos de recomposición salarial no remunerativo, en cuotas y a cuenta de paritaria”. Asimismo, explicaron que “se pidió que el pago se ejecute en al menos cinco cuotas”.
Quien también se refirió a la cuestión fue el presidente de la Coordinadora de las Industrias de Productos Alimenticios (Copal) y vicepresidente de la UIA, Daniel Funes de Rioja, quien en declaraciones periodísticas expuso: “No es bono, es una compensación no remunerativa, a cuenta de futuras negociaciones, y las formas de pago se van a adecuar en el marco de cada convenio colectivo”.
Al mismo tiempo, indicó que “sea no remunerativo significa que el importe va a ir directo al bolsillo del trabajador, integralmente, sin cargas sociales ni ninguna otra fiscalidad”.
Desde los gremios, el secretario general de la Unión Tranviarios Automotor (UTA), Roberto Fernández, cuestionó el planteo de los sectores empresarios, que piden poder pagar el anticipo de paritarias en hasta cinco cuotas, y se quejó de que si el Gobierno acepta ese esquema, “el trabajador pierde lo poco que le dan porque se lo come la inflación”.
“No se sabe nada cómo es el bono, cómo fue el acuerdo. A simple vista, es un adelanto de sueldo que después se lo van a descontar. No sabemos, hasta que salga el decreto, cómo se va a pagar”, planteó el dirigente sindical.
En declaraciones radiales, el líder de la UTA reconoció el impacto de la crisis tanto en el sector obrero como en el empresario, pero se quejó del reclamo de algunos sectores por extender el cronograma de pago hasta cinco meses. “El trabajador pierde lo poco que le dan, porque se lo come la inflación”, advirtió.