A pocos días de haberse cumplido dos años del asesinato de Anahí Benítez, la adolescente de 16 años que fue vista por última vez el 29 de julio de 2017 y hallaron sin vida una semana más tarde en la Reserva Santa Catalina, la herida sigue abierta. A meses de comenzar el juicio, en diálogo con Política del Sur, el abogado de la familia de la joven sostuvo la culpabilidad de los dos imputados y aseguró que “contaron con la ayuda de otros cómplices”. 

Recientemente, previo al receso judicial, el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 7 de Lomas de Zamora confirmó que los debates probatorios en los que serán juzgados Marcos Bazán y Marcelo Villalba comenzarán el 18 de febrero del año próximo. Gracias al reclamo encabezado por la madre de la víctima, Silvia Pérez Vilor, serán incorporadas durante el proceso algunas pruebas “fundamentales” requeridas por la parte damnificada.

“De tener resultados positivos, estamos seguros de que se va comprobar la culpabilidad de ambos imputados”, aseguró el abogado de la familia de Anahí, Guillermo Bernard Krizan.

Las pruebas a las que hizo referencia consisten en una investigación llevada a cabo por Interpol en el celular de la chica, debido a que sus redes sociales habrían sido manipuladas durante el tiempo que permaneció cautiva. Además, se autorizó una nueva pericia mitocondrial de unos cabellos encontrados en la casa de Bazán para comprobar si hay ADN de la víctima.

Durante los últimos meses, la fiscalía a cargo de la instrucción del caso habría iniciado una nueva línea investigativa con el fin de establecer la existencia de otras personas que habrían participado del crimen. Sin embargo, la negativa de algunos testigos a declarar haría más difícil esclarecer el marco en el que se dio el homicidio.

“No tengo dudas de que hubo más participantes, porque semejante atrocidad no pudo haber sido cometida por dos personas solamente. Lo que nos está costando es juntar la prueba por la negativa de los testigos a declarar”, precisó el letrado que representa a la parte acusatoria del caso.

A fines de abril, Pérez Vilor realizó un acampe en el portón de entrada de los Tribunales de Lomas de Zamora que duró varias horas hasta que finalmente consiguió una respuesta satisfactoria de parte de los jueces del Tribunal a cargo del juicio, quienes finalmente autorizaron las pruebas incorporadas.

Por su parte, como en cada aniversario de su muerte, los excompañeros de Anahí de la Escuela Normal Antonio Mentruyt (ENAM) de Banfield organizan varias recorridas programadas para este fin de semana en Capital Federal y el Conurbano para repartir volantes con el mismo fin de siempre: que su asesinato no quede impune.

Mientras tanto, los imputados Marcos Bazán y Marcelo Villalba permanecen tras las rejas como los únicos detenidos que tiene la investigación. El primero será juzgado por el delito de “privación ilegítima de la libertad agravada, homicidio agravado por alevosía criminis causa y por mediar violencia de género”, mientras que el segundo está imputado por “robo, abuso sexual agravado con acceso carnal” y “privación ilegítima de la libertad agravada y homicidio agravado por alevosía, criminis causa y por mediar violencia de género”.

“Durante las jornadas que dure el juicio se comprobará, en primer lugar, la autoría penal de los dos y el resto de los involucrados en tan aberrante crimen”, sostuvo el abogado Bernard.