

Por: Diego Lanese
Los gremios que forman el Frente Sindical y la Corriente Federal, más las tres fracciones de la CTA, los movimientos sociales y sectores clasistas, tienen todo listo para iniciar a las cero hora de hoy un paro nacional contra las políticas económicas del gobierno nacional, una medida largamente discutida que no tendrá el aval de la CGT ni de los sindicatos del transporte. Pese a esto, los promotores de la medida esperan que sea “masiva”, ya que además de parar, los trabajadores marcharán a Plaza de Mayo para mostrar el descontento que existe por el rumbo de la economía.
Los intentos del Gobierno de desinflar la medida, por el momento no logran el efecto deseado, y a priori habrá una fuerte presencia de los sindicatos en la calle. Si bien trenes y colectivos funcionarán, lo harán con restricciones, lo que junto a los cortes de calle puede potenciar el paro, que profundizó la grieta en el movimiento obrero organizado.
El paro de hoy terminará de marcar un quiebre importante dentro de los gremios, de acuerdo a la adhesión o no a la protesta. De un lado, el Frente Sindical, la Corriente Federal, las tres CTA y otros espacios; del otro, la conducción de la CGT y la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT), que vaciaron la protesta con el argumento del sectarismo de la misma.
Ante esto, y con la imposibilidad de parar el transporte público, los organizadores decidieron romper con una vieja tradición del sindicalismo, que no hace movilizaciones cuando hay paro. Hoy, en cambio, se verán marchas y actos locales, además de 200 ollas populares que unirán el Monumento al Trabajo y Plaza de Mayo. El cierre será luego de las 13, cuando haya un acto final, que en la previa fue motivo de mucha preparación para evitar cualquier tipo de incidentes como el ocurrido en 2016 con la famosa toma del atril.
“El paro va a ser inclusive mayor a la expectativa que tienen las organizaciones. Hoy la CGT está negando el paro y nosotros creemos que muchos trabajadores que están enrolados en sus gremios van a parar, porque están viendo su heladera más que su afiliación sindical”, le dijo a Política del Sur el secretario adjunto de la CTA Autónoma de Capital Federal, José Peralta.
Para el dirigente, esta situación “está sobrepasando a las organizaciones, y nuestro deber y nuestra responsabilidad es ponernos al frente y darle continuidad para garantizar los derechos de que se pueda parar”.
Por la adhesión de las distintas corrientes de la CTA, pararán los docentes de todos los niveles (la Ctera, la Conadu y la Conadu Histórica), la administración nacional y provincial (por ATE) y varios sectores más, como el subte.
De parte del Gobierno, la estrategia apunta a debilitar legalmente la protesta. Primero, intentó garantizar el tránsito de los trenes aplicando la conciliación obligatoria la semana pasada, en el marco de un conflicto sectorial. Pero no pudo impedir que mañana, 1º de mayo, se deje de prestar servicio. Por eso, busca declarar ilegal la medida ante la no adhesión de la CGT. La iniciativa incluiría multas y sanciones para quienes igual se sumen.
En el entorno de la organización ya avisaron que el paro se mantiene. “No nos van a correr con sanciones, que ya nos aplicaron y no nos amedrentaron”, dijo un dirigente del Frente Sindical ante la consulta de Política del Sur, y recordó que la protesta tiene “el paraguas institucional” de dos entidades internacionales: la Federación Internacional del Transporte -(ITF, por su sigla en inglés), donde Pablo Moyano ejerce como vicepresidente desde el año pasado- y de la Confederación Sindical Internacional (CSI).
Además, se acoplará un grupo de dirigentes de izquierda y de gremios dominados por el clasismo, que plantean una agenda propia de temas. Ayer por la mañana, en la sede del gremio docente Ademys, remarcaron que se sumarán a la protesta, “pero de manera muy crítica, porque llega muy tarde y no ha tenido ningún tipo de preparación”.
En cuanto a la movilización, el grueso de los gremios convocó a una marcha a partir de las 13 hacia la Plaza de Mayo, en tanto que los integrantes del sindicalismo combativo anunciaron que se sumarán con una columna propia, que se congregará a partir de las 12 en la intersección de Avenida 9 de Julio y Avenida de Mayo.
Quién para y quién no
El mapa de los servicios y actividades afectadas para el paro de este martes se fue completando con el correr de los días, y hoy muestra el siguiente panorama:
Transporte:
-Subte: no habrá servicio por paro de los metrodelegados.
-Colectivos: habrá servicios, ya que la UTA no adhiere, aunque un sector opositor a Roberto Fernández adelantó que unas 90 líneas del Conurbano bonaerense se verán afectadas.
-Trenes: se espera un funcionamiento normal, sin adhesión de la Unión Ferroviaria, La Fraternidad ni Señaleros. Se espera la decisión de la APDFA (sindicato del personal jerárquico de ferrocarriles). No habrá servicio en el tren Sarmiento.
-Camioneros: el sindicato de choferes de camiones es uno de los impulsores del paro general y sus afiliados no prestarán servicio. Se cancelarán las tareas en todas las ramas de transporte de mercancías de la actividad.
-Vuelos: paran pilotos de APLA, aeronáuticos de APA y el sindicato de Aeronavegantes. Afirman que no habrá vuelos aéreos.
Educación: La Confederación de Trabajadores de la Educación (Ctera) confirmó su adhesión, y por lo tanto, habrá paro en escuelas estatales de todo el país. Lo mismo pasará en las escuelas privadas, ya que el sindicato de docentes privados (Sadop) también se sumó a la huelga. Los docentes universitarios también irán al paro con adhesión de Fedun, Conadu y Conadu Histórica.
Bancos: la Asociación Bancaria (AB) se plegó a la huelga y no habrá bancos durante la jornada. Podría verse afectado el transporte de caudales a cajeros automáticos, que está a cargo de personal afiliado a Camioneros.
Salud: la Fesprosa, gremio que nuclea a médicos y profesionales de la salud, lanzó un paro que afectará la actividad en hospitales públicos de todo el país. Se garantizarán servicios de guardia.
Administración pública: la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) para en todo el país, por lo que estará resentida la atención, aunque el alcance será dispar, ya que UPCN no participará de la jornada.
Industria: los mecánicos del SMATA y aceiteros de la Federación Aceitera van al paro y no habrá actividad en fábricas. Harán lo propio los curtidores y empleados del cuero del SOC y trabajadores gráficos de la FGB y del vidrio. En cuanto a los petroleros, gremios de la Patagonia (Sindicatos de Petroleros convencionales y jerárquicos de Santa Cruz) confirmaron su adhesión.