

En una jornada que comenzó con la noticia de que el dólar llegaba a 47 pesos y el riesgo país a 935 puntos, el Concejo Deliberante de Avellaneda trató y aprobó ayer por mayoría la Rendición de Cuentas del gobierno municipal de Jorge Ferraresi, correspondiente al ejercicio 2018. Precisamente, la discusión giró alrededor de la devaluación y la inflación que se fue acumulando a lo largo de ese período y de cómo este panorama fue afectando a la ejecución de las partidas.
Por este motivo, la crítica principal que el oficialismo y los bloques aliados le hicieron a sus pares de Cambiemos fue que hayan descontextualizado la rendición de cuentas de la realidad que atraviesa la Argentina y, en consecuencia, el Municipio.
En su intervención, el concejal de Cambiemos Rubén Conde planteó que a fines del año pasado “se ha aprobado un presupuesto de 5.845 millones de pesos y tuvo una ampliación de nada menos que 1.500 millones, casi un 26 por ciento, es decir, un tercio del presupuesto”, y agregó que “estamos una vez más frente a un problema que tiene el Ejecutivo cuando tiene que estimar gastos y cuando los tiene que ejecutar”.
Asimismo, el edil cuestionó que hubo una baja en el “nivel de cobrabilidad” de las tasas municipales y señaló que eso “tiene más que ver con el nivel de ineficiencia que tiene este Municipio para cobrar”. Por eso, sugirió que el gobierno local apunte a “una política directa hacia ese sector que no está pagando y que es una suma más que importante para la recaudación de este Ejecutivo”.
También, Conde hizo un detalle de las diferencias entre los valores que se votaron en el presupuesto para las distintas áreas y los que se utilizaron, indicando que hubo una “subejecución”. Por ejemplo, dijo que para el Fondo de Fortalecimiento de Programas Sociales había más de 5,5 millones de pesos y se ejecutó un millón; mientras que para el Fondo de Infraestructura Municipal había 11,2 millones de pesos y quedan en caja 800 mil pesos.
En lo suyo, el concejal del monobloque Red por Argentina, Ramón Leiva, defendió la rendición haciendo especial hincapié en el aporte que hizo el Municipio para la infraestructura de las escuelas provinciales del distrito (unos 180 millones de pesos), y culpó en ese sentido a la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal. Además, destacó lo destinado a seguridad: alrededor de 226 millones, precisó.
Por su parte, el presidente del bloque PJ-Unidad Ciudadana, Pablo Vera, salió al cruce de Conde con un alto nivel de ironía, al observar que el edil produjo “un hecho científico muy importante: ha aislado el presupuesto de la rendición de cuentas municipal de la realidad que se da en la ciudad de Avellaneda, provincia de Buenos Aires, Argentina, planeta Tierra, sistema solar”.
En esa línea, el ex jefe de Gabinete municipal opinó que “la rendición de cuentas no tiene un fin en sí mismo, en realidad lo que hace es determinar si el presupuesto se ejecutó respetando el espíritu del presupuesto”, y precisó que, al analizar los recursos tributarios con respecto al ejercicio anterior, en 2019 la Comuna aumentó un “37 por ciento”. “No estamos contentos. Efectivamente, es más de lo que habíamos proyectado, pero hay 10 puntos menos que la inflación”, que es de 47, resaltó.
Luego de haber hecho una comparación entre una rendición de cuentas horizontal (el análisis de gastos y recursos que el Cuerpo trataba en ese momento) y la vertical (la que harán los vecinos cuando voten en las elecciones de octubre), Vera llegó a una conclusión que, en realidad, fue una convocatoria urgente a la unidad del peronismo de cara a los comicios de este año.
“Nosotros le pedimos al bloque de Cambiemos, en el marco de tratar de que este Cuerpo sea lo más coherente posible, aun respetando las diferencias, que no nos acompañen, pero se abstengan; y a los demás bloques les pedimos que nos acompañen, que estamos orgullosos y que todos juntos vayamos a esa rendición de cuentas vertical en octubre, que estamos absolutamente convencidos que va a garantizarle cuatro años más al intendente Jorge Ferraresi”, cerró.
Otros proyectos
Por otra parte, el HCD avaló un convenio específico de asistencia científico tecnológica en materia de investigación, desarrollo e innovación entre la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) y la Municipalidad de Avellaneda.
Al respecto, el jefe de bloque de Cambiemos, Sebastián Vinagre, manifestó la negativa de su bancada a este acuerdo debido a que -juzgó- “es la tercerización de una prestación de servicios que puede ser efectuada por personal municipal”, mientras que el Municipio “tiene la capacidad técnica y de recursos humanos suficiente para el cumplimiento de los objetos de estos convenios”.
Indicó que la iniciativa requiere de “erogaciones injustificadas” y criticó: “Este es un ejemplo más del uso de los bienes municipales y las formas que no compartimos con la gestión municipal.”
En otro orden, el Cuerpo declaró de interés legislativo el Torneo de Actividades Lúdicas de Adultos Mayores “Jugar Cosas de Grandes”, impulsado por la Secretaría de Gestión Ciudadana municipal. La resolución fue presentada sobre tabas y se aprobó de forma unánime.
Al inicio de la sesión se había producido una discusión entre Leiva y Vinagre porque el primero pidió sobre tablas que el Cuerpo se expida con una comunicación de repudio a los dichos desafortunados de la diputada nacional Elisa Carrió, quien en una reunión de dirigentes de Cambiemos dijo que “Gracias a Dios que se murió”, en alusión al exgobernador de Córdoba José Manuel de la Sota.
Sin embargo, el concejal del PRO pidió la palabra para aclarar que la manera en que procedía su par de Red por Argentina no respondía a “las formas de este Concejo”. De modo que Leiva lo ingresará por escrito para que se trate en la próxima sesión ordinaria.