

Por: Diego Lanese
En septiembre del año pasado, el gobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey, se reunió con los integrantes del Movimiento de Acción Sindical Argentino (MASA), el espacio que desde que se formó el triunvirato está fuera de la conducción de la CGT. El encuentro dio lugar a versiones sobre el apoyo que daría el espacio al salteño en su carrera como candidato a presidente. Pero la semana pasada, la mayoría de los gremios que componen este armado se distanció de esta idea y alertó que el respaldo a Urtubey es una cuestión “inconsulta” de cuatro sindicatos del espacio.
Así, gran parte del MASA se sumó a una nueva estructura, denominada Sindicatos en Marcha para la Unidad Nacional (SEMUN), que incorporó a su grupo al metalúrgico y extitular de la CGT, Antonio Caló, que buscará trabajar por “la unidad del peronismo”.
De esta forma, con la fractura del MASA y el surgimiento de este nuevo espacio, se suma un nuevo integrante del mosaico que forma hoy el movimiento obrero, que buscará acomodar los tantos en la compleja disputa interna del peronismo. En sus primeros pasos, hubo reuniones con el exgobernador Felipe Solá y el exministro de Economía Roberto Lavagna.
EL SEMUN está liderado por el titular de la Unión Ferroviaria, Sergio Sasia, y el metalúrgico Caló, y cuenta con el respaldo de la mayoría del MASA, entre ellos, los dirigentes Guillermo Moser (Luz y Fuerza), Osvaldo Ladarola (Foetra), Raúl Quiñones (empleados del tabaco), Juan Speroni (Obreros Navales), Juan Palacio (trabajadores del correo), Luis Pandolfi (tintoreros), Ramón Luque (Federación de Papeleros), entre otros.
La ruptura con el referente del MASA, Omar Viviani (taxistas), es por su decisión “inconsulta” de respaldar y trabajar por la candidatura de Urtubey, una medida que tomó junto a Norberto Di Próspero (trabajadores legislativos), Roque Garzón (empleados de farmacias) y Humberto Bertinat (municipales bonaerenses).
“El resto del MASA decidió, entre otros, buscar una alternativa, ver de qué manera podemos hablar con los distintos precandidatos para trabajar para la unidad del peronismo. Ahí lo llamamos a Caló, que enseguida se sumó, y decidimos ponernos en marcha, y nació este espacio”, le explicó a Política del Sur Sasia, quien sobre sus objetivos, adelantó: “Estamos ligados a lo político, pero iremos materializando que un cuerpo que apostamos pueda contribuir a la unidad del movimiento obrero.”
Los primeros pasos del SEMUN estuvieron ligados a la interna del PJ. Primero se reunieron con Solá y luego con Lavagna, la figura que crece dentro del sindicalismo, apadrinada por Luis Barrionuevo y con respaldo de varios referentes del movimiento obrero. De esos encuentros, los dirigentes rescataron la idea de trabajar para la unidad del peronismo, y así lograr el triunfo en octubre de este año.
Sobre la cumbre con Lavagna, Sasia confirmó que lo vieron “muy decidido a ser candidato”. “Nos explicó que su idea es hacer un frente amplio, plural, por eso se reunió con Ricardo Alfonsín, con el gobernador de Santa Fe, Miguel Lifschitz, y en esa línea le propusimos tender los puentes para hablar con otras líneas del peronismo”, agregó el dirigente ferroviario.
En este sentido, Sasia sostuvo que Lavagna no cerró la puerta a unas primarias, como circula en los medios. “A nosotros no nos dijo directamente que no quiere PASO, lo que nos dijo es que sería bueno trabajar para lograr una fórmula que no tenga el desgaste de una interna, y nos va a dar mucho más cuerpo y fortaleza para las elecciones generales. Esa es la concepción de cómo ve Lavagna el proceso”, dijo el ferroviario.
En estos días, SEMUN seguirá con sus reuniones con otros referentes del peronismo para intentar la unidad. Además, habrá un encuentro con la conducción de la CGT para analizar la participación del espacio en la marcha del 4 de abril en defensa del trabajo. En la cumbre con la dirigencia cegetista se analizarán los detalles de la jornada, los motivos y, a partir de esto, el espacio decidirá si participa.