La construcción del complejo habitacional Estrella del Sur está detenida desde hace meses, cuando la acreedora, Bapro Negocios, presentó la liquidación ante la Justicia. Los adherentes buscan alternativas para concretar el proyecto.

El terreno es administrado como fideicomiso por el Grupo Provincia y es el primer caso en el país en el que se solicita la liquidación de este tipo de emprendimientos. “Pedir la liquidación es como pedir el concurso de una empresa comercial”, ejemplificó Lucio Niro, presidente de Niro Construcciones S.A., firma encargada del sector de albañilería del emprendimiento.

“Las empresas suelen llamar a concurso cuando no tienen recursos para afrontar las deudas, este no es el caso”, continuó durante una entrevista radial con Política del Sur, y afirmó que “el fideicomiso tiene un patrimonio de 1.300 millones de pesos en la construcción” y adherentes que mantienen el pago de las cuotas de las unidades.

Niro especuló que el banco “no tiene problemas económicos, sino que fue un problema financiero”, y evaluó que corresponde a una “negligencia, una incapacidad de la entidad en administrar un emprendimiento de estas características”.

En la actualidad, de las 900 unidades vendidas originalmente, 480 se mantienen como adherentes con el pago de las cuotas mensuales por la propiedad. El resto de los contratos fueron rescindidos. El empresario consideró que la situación es “lógica”, ya que “la inflación de estos cuatro años que se retrasó la obra le fue comiendo el salario a la gente e hizo que ya no pudiera cubrir la cuota”, justificó.

Estrella del Sur es un emprendimiento inmobiliario iniciado en 2011 que consta de cuatro torres de 26 pisos con un total de 924 unidades y un sector de estacionamiento para más de 200 autos. Está ubicado sobre avenida Hipólito Yrigoyen al 600, municipio de Avellaneda, “a sólo diez minutos del Obelisco y con acceso directo a la zona sur”, según reza el anuncio. Hoy puede distinguirse fácilmente como una gran edificación de hormigón abandonada en pleno centro de la ciudad regional.

Bajo la expectativa de “una oportunidad imperdible de adquirir una excelente calidad de vida”, como prometía el proyecto, unas 900 familias invirtieron para solventar la edificación, que debía haberse finalizado en 2014. Sin embargo, desde aquel año, Niro Construcciones se pone al frente del emprendimiento y firma un contrato con aspiración para el 2019.

En noviembre último se frenó la edificación porque, a pesar de que la asamblea de adherentes estaba en contra, Bapro Negocios presentó la liquidación del fideicomiso ante el Juzgado Nacional de Primera Instancia en lo Comercial 12, bajo el argumento de que “el emprendimiento era inviable”, según confirmó el presidente de la constructora.

Según contó Niro, un comité de damnificados se reúne todas las semanas con la firma constructora para avanzar en alternativas y presentar una oferta concreta al juzgado como solución para continuar con el proyecto. Aspiran a contactarse con el presidente del Grupo Provincia, Jorge Macri, para “exponer las opiniones” del conflicto.