Los estatales, entra el congelamiento salarial y las amenazas de nuevos despidos

En lo que significó la reanudación de la paritaria del estado nacional, los gremios asistieron a una reunión con funcionarios del gobierno, con la esperanza de discutir lo que se considera una “importante pérdida del poder adquisitivo”. Pero se fueron de esa cumbre con las manos vacías:

Los representantes de la gestión libertarias fueron sin una oferta concreta para mejorar los salarios estatales. La discusión paso a un cuarto intermedio, y todo hace pensar que hasta enero del 2026 no habrá novedades, lo que genera alarma, ya que el retraso de los ingresos del sector público se sigue profundizando, y según el último reporte de la Junta Interna de ATE en el INDEC está cerca de alcanzar los 30 puntos.

Este virtual congelamiento salarial no es la única amenaza que deben soportar los trabajadores de la administración pública. Por estas horas, circula la versión de un nuevo ajuste de la plantilla del personal, un pedido del Ministerio de Desregulación de reducir un 10 por ciento la cantidad de empleados en todos los organismos estatales. Esto significa que peligran unos 30 mil puestos de trabajo.

Ante este panorama, la dirigencia sindical prepara medidas, y la conducción nacional de ATE podría adelantar el paro nacional aprobado para el día que se trate la reforma laboral. Panorama complejo para el sector para la segunda mitad del mandata de Javier Milei.

La doble amenaza que sufren los estatales adelanta un cierre de año tenso. En materia salarial, el gobierno sigue mostrando falta de voluntad de mejorar los ingresos, que están congelados bajo la estrategia del techo salarial libertario.

En la última reunión de la paritaria del Estado nacional, la falta de una oferta concreta –incluso el 1 por ciento que se venía dando durante el año –fue muy mal recibido por los gremios.

Según informaron desde ATE, en lo que va del 2025, el gobierno otorgó sistemáticamente aumentos por debajo del Índice de Precios al Consumidor (IPC), los cuales fueron rechazados por el gremio, aunque convalidados por UPCN, la otra entidad del sector. En los primeros 10 meses del año, “el incremento fue de 13,6 por ciento mientras que la inflación en el mismo período fue de 24,8 por ciento”.

La pérdida de más de 11 puntos es superior si se usan los reportes de los trabajadores del INDEC, que miden dos canastas de bienes y servicios que establecen el salario “deseable” para una familia tipo. Según el trabajo, al que tuvo acceso Política del Sur, en octubre de 2025 una pareja de 30 años con dos hijos en edad escolar  necesitó 2.027.283 pesos por mes para cubrir consumos mínimos.

Ese monto se descompone en: “691.887 pesos para la Canasta Alimentaria Mínima y 1.335.396 pesos para otros consumos esenciales (transporte, salud, educación, servicios públicos, etc.)”. Estas canastas no son las oficiales del INDEC para medir pobreza, sino las Canastas de Consumos Mínimos, un “enfoque metodológico más estricto y realista desarrollado dentro del propio Instituto”. Con estos valores, queda claro: “Ningún trabajador debería percibir de bolsillo menos de 2.027.283 de pesos”.

Para el reporte, realizado por la Junta Interna de ATE-INDEC, los resultados “vuelven a confirmar un deterioro profundo e insostenible en las condiciones de vida de quienes sostenemos el Estado”. Desde la asunción del actual gobierno, “la inflación acumulada alcanza el 241por ciento, mientras que el salario real del caso testigo del SINEP (Nivel D, Grado 0) perdió 28,25 por ciento”.

Por esto, el salario de diciembre 2015, actualizado a octubre 2025, “debería ser 1.417.335 pesos, mientras el salario real actual es de apenas 636.289 pesos.  “La pérdida del poder adquisitivo acumulada desde 2015 es del 54,8por ciento, equivalente a 41 canastas básicas totales”, denunció el informe. “Estamos ante un derrumbe sin precedentes de los ingresos del sector público nacional”, agregaron.

Además, marcaron que la evidencia oficial y académica confirma una tendencia alarmante: “Crecimiento de la morosidad de las familias,  mayor uso compulsivo de tarjetas de crédito,  endeudamiento informal,  préstamos y financiamiento para consumos básicos”.

Este fenómeno, que hoy ya es récord, muestra que los salarios estatales “no solo están retrasados: se volvieron insuficientes para sostener la vida cotidiana”. Por esto, ATE-INDEC reclama una serie de reivindicaciones, como aumento de emergencia del 118 por ciento, en una sola cuota; reapertura urgente de la paritaria, sin techos; bono mensual de 250 mil pesos para todos los trabajadores estatales; ase a planta permanente sin quita salarial, entre otras cuestiones.

El pase a planta, que entrega estabilidad laboral al personal, es clave en momentos que volvieron las versiones de un nuevo plan motosierra en el Estado Nacional. El nuevo ajuste del personal estatal se lo confirmó el Jefe de Gabinete Manuel Adorni y el ministro de Desregulación Federico Sturzennegger a los ministros del gabinete, en una reciente reunión donde se aseguró que estiman que se debe dejar sin trabajo a cerca de 30 mil empleados públicos durante las próximas semanas.

La idea que circuló en varios medios es reducir la planta estatal un 10 por ciento con la no renovación de contratos en diciembre y dejando sin trabajo a miles de empleados de distintos ministerios, pero también de organismos descentralizados como el INTA, INTI, el CONICET, CONEAU, INDEC, ANSES, ARCA, ENACOM y también en los medios públicos, en donde podría haber un proceso de retiros voluntarios. De acuerdo con los últimos datos del INDEC, el sector público nacional —entre administración central, empresas y sociedades— suma 285.570 empleados. Desde diciembre pasado, la gestión de Javier Milei ya desvinculó más de 58 mil personas, principalmente en áreas centralizadas.

Uno de los organismos apuntados para el nuevo ajuste de personal es el INDEC, que está bajo la mirada de varios gremios por la medición de la inflación. “En principio este anuncio o versión nos tomó por sorpresa, porque se hizo entre el viernes a la tarde y el fin de semana”, sostuvo Raúl Llaneza, de la Comisión Interna de ATE en el INDEC.

En diálogo con Política del Sur, el dirigente recalcó que el organismo “es parte de un grupo de entidades públicas que siempre son nombradas como parte del ajuste”, en este paso la baja del 10 por ciento de su personal. En el caso concreto de los contratados, Llaneza mantuvo un dialogo antes de que se conociera estas versiones con el director Marcos Lavagna, y que le aseguró que “la vocación es renovar es renovar todos los contratos a enero del 2026”.

Ante este nuevo escenario, desde ATE pedirán al funcionario una nueva reunión para que les informe las precisiones que tenga. Ante la posibilidad de nuevos despidos, los trabajadores del INDEC tendrán una asamblea este jueves, donde discutirán entre otras cuestiones este rumor de nuevos despidos, además de discutir la situación salarial, que está en un cuarto intermedio y podría haber una nueva reunión recién en enero del 2026.

“La asamblea será por estos dos temas centrales, el retraso salarial y esta amenaza de nuevos despidos, que llegarían al 10 por ciento de la plantilla”, recalcó Llaneza. La idea de ATE-INDEC es además participar de la marcha del jueves 18 de diciembre al Ministerio de Desregulación. Antes, junto a otras juntas internas que pertenecen al Ministerio de Economía se plantean algunas acciones, para e 10 o el 11 de diciembre.

Ese mismo 11, los trabajadores del INDEC harán su tradicional actividad de reclamo cuando el organismo informe el nuevo IPC, en este caso el de noviembre de este año.