La innovación es clave en la lucha contra el VIH

Este 1° de diciembre se conmemora el Día Mundial de la lucha contra el SIDA, declarado en 1988 por la Organización Mundial de la Salud. Política del Sur conversó con Miguel Pedrola, director científico para Latinoamérica y el Caribe en AIDS Healthcare Foundation y médico especialista en Medicina Interna e Infectología.

“La realidad del virus del VIH y su infección ha cambiado drásticamente desde que teníamos primero la imposibilidad de saber quién producía una enfermedad a la cual le llamábamos SIDA, hasta llegar en estos momentos a no solo cronificar la enfermedad, mejorar la calidad de vida, sino también estar empezando a pensar que en el 2030 podríamos terminar con la epidemia de VIH en el mundo”, destacó.

También explicó que “es otra infección de transmisión sexual y por lo tanto cualquier persona que tiene relaciones sexuales tiene riesgo de infectarse de VIH". "El virus no define quién es la persona ni el género o cuál es el deseo sexual de cada una de ellas para la infección. Entonces, ya hace bastante tiempo que venimos trabajando con este tema de tratar de sacar el estigma y la discriminación que conlleva la infección por VIH”, aclaró.

Por otro lado, habló sobre la evolución del tratamiento contra esta enfermedad. “Hoy tenemos la posibilidad de tener medicamentos de larga duración o de acción prolongada. Es decir, poder colocarse un inyectable cada dos meses y que este sea un tratamiento totalmente efectivo. Más allá de eso, todavía seguimos con medicamentos de una dosis diaria por vía oral. Y estamos planteando pronto extender el tratamiento y llegar a tratamientos de una inyección cada seis meses”, precisó.

“Todavía no tenemos al alcance de la mano la posibilidad de curar a ninguna persona pero cada día estamos mucho más cerca de ella. También estamos trabajando sobre lo que se plantea como cura funcional. Y esto quiere decir que la persona siga viviendo con VIH, pero que no tenga que tomar ningún tipo de medicamentos, porque solamente el cuerpo lo pueda manejar”, explicó el especialista.

Sobre los avances científicos en Argentina, manifestó que “es líder a nivel mundial, el nivel médico que hay en Argentina es muy bueno. Muchas veces no es acompañado por el gobierno de turno para seguir impulsando la investigación". "Tenemos el acceso a diferentes tipos de antirretrovirales”, apuntó. 

Y detalló: “Hay un medicamento que se aplica en forma subcutánea cada 6 meses para prevenir el VIH. El mismo se llama Lenacapavir y es del laboratorio Gilead, que en África está vendiendo este tratamiento por 40 dólares anuales y en Argentina define venderlo por 28.000 dólares anuales". "El problema es que es un tema monopólico, entonces muchas veces se necesita del accionar de los gobiernos para poder discutir estos temas y llegar a mejores negociaciones”, lamentó Pedrola.

Sobre los tratamientos para personas con VIH, señaló que “algunas formulaciones no están disponibles y se ha tenido que cambiar el tratamiento por otras formulaciones tan efectivas como las anteriores. Pudo haber pasado que una persona en vez de tomar un comprimido debería tomar dos comprimidos juntos y esto también conspira bastante contra la calidad de vida de las personas". "Pero en Argentina todavía tenemos medicación suficiente para las personas que viven con VIH, para que puedan tomarla y tener un tratamiento efectivo”, mencionó.

“Deberíamos pensar que deben disminuir la cantidad de nuevas infecciones, entendiendo que hoy una persona que vive con VIH y está en tratamiento y el tratamiento es efectivo, esa persona no transmitiría el VIH. A nivel mundial, de todas las regiones, Latinoamérica es la única que sigue aumentando el número de diagnósticos al 9% en este momento”, reflexionó.  “En Argentina, acaba de publicar el Gobierno, también aumentaron los nuevos diagnósticos de 6.300 pasamos a 6.900 nuevos diagnósticos por año. Y lamentablemente tampoco han bajado las muertes por SIDA. Entre 1.000 y 1.500 personas mueren anualmente en Argentina por SIDA y tiene que ver con la dificultad de acceder a un diagnóstico temprano como para tener un tratamiento acorde a las necesidades de esa persona”, cerró.