Tras las elecciones el valor del dólar descendió levemente, dando un respiro a los mercados. Sin embargo, los precios de los productos de la canasta básica no tuvieron descanso en varias semanas, así como el combustible y el transporte.
Política del Sur conversó sobre esta cuestión con Juan Carlos Vacarezza, economista, presidente del Comité Ejecutivo en Fundación Buenos Aires XXI y ex vicedecano de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de Lomas de Zamora.
Sobre el panorama económico observó: “Esto va a ayudar para pasar los cimbronazos de los vencimientos de la deuda pública, sobre todo en moneda extranjera, posiblemente para lo que vence ahora y en el 26, en enero y en julio, si llegamos. Posiblemente sea para eso”.
“Aún Estados Unidos, bancando los vencimientos, no es casualidad que de golpe JP Morgan, que es el que hace el índice del Riesgo País, lo bajó de 15 a 6, le agrega un poco del 3%, 4% del interés internacional y posiblemente se pueda renovar la deuda que vence. Y sus inversores puedan sacar los dólares que tienen acumulados con renovación y con los dólares que alcance de Estados Unidos. Lo que no podemos saber es hasta dónde puede esto alcanzar”.
Además consideró que el precio del dólar actual “tiene que ver con el resultado de la elección del domingo en buena medida. La sociedad argentina tiene un cansancio que no quería despertar el lunes con el dólar por las nubes o con una crisis. Y aunque la opción libertaria que tenían a mano no fuese su favorita, no fuese lo que le hubiera gustado a muchísima gente, prefirieron votarla con tal de dejar atrás el riesgo de potenciar una crisis”.
Y agregó que “hubo miedo no digo en el 40%, habrá sido el 10%, el 8% de lo que sacaron ellos. Ahí hay una responsabilidad y hay otra responsabilidad en la fuerza que perdió. Fuerza Patria concentró el accionar de su proyecto político por los casos que hubo desde el punto de vista jurídico y policial”.
En línea con esto, consideró que “tampoco expresó de ninguna manera un programa, no a fondo porque se elegían diputados nacionales y senadores, pero sí esbozar un esquema de lo que se podía plantear en el futuro Congreso. Confiaron que las denuncias que demolieron la imagen del gobierno en agosto, septiembre, un poco de julio, iban a hacer el trabajo que tenían que haber hecho desde el punto de vista político y no fueron suficientes. Algo le pasó también a la CGT que ni se movió”.
Además, destacó que “esto va a estar en consonancia con lo que haga Estados Unidos. Que Estados Unidos sigue tirando dólares a la plaza, los dólares van a quedar ahí. Si un día se enoja Trump, se levanta el presidente estadounidense para el otro lado y cambia. Y en Argentina hay algo, más allá del miedo de los mercados, que reaccionan ante una pérdida del gobierno, tenían problemas con el dólar, el riesgo país, los precios en los supermercados, además hay un gran problema dentro de la misma Argentina”.
“Eso tiene que ver con el antiperonismo que existe en la República Argentina. Hay un 30% de la población argentina que no es antikirchnerista, anti gobierno, es antiperonista. Y lo tremendo es que en ese antiperonismo hay clases medias bajas que hoy han dejado de tener cualquier cantidad de beneficios que tenían. Es el enemigo simbólico para un sector del país. Esa es la excusa perfecta para soportar lo insoportable, para que yo soporte todas las políticas salvajes que me van a aplicar”, planteó el economista.
Continuando con su análisis, subrayó que “también es histórico que a veces los pueblos, demuestran una maestría extraordinaria en elegir a sus verdugos. Este gobierno celebra el fin de la casta y la sociedad celebra que el enemigo haya perdido, aunque eso signifique perder sus derechos en el futuro. Yo soy recontra crítico de los gobiernos peronistas, nunca los defendí porque cometían errores terroríficos. Inclusive socialmente, se dedicaron a tirar doctrina histórica por la ventana, reemplazandolo por lo que ellos llaman progresismo”.
“Está cansado el votante histórico del peronismo, que votaba siempre a esos progresistas. Porque no se sabe a quién llevan y qué motorizan. Porque esos progresistas que están en ese frente, son diputados por los votos peronistas, no por los votos que ellos tienen propios”, cerró.