La Unión Cívica Radical es uno de los partidos políticos históricos que más internas y cambios ha sufrido en los últimos tiempos. Dentro del radicalismo, las diferencias continúan sin solucionarse, mientras el escenario político general se sigue modificando.
Política del Sur conversó al respecto con Martín Ruiz Deza, dirigente radical de Avellaneda, quien manifestó que “nosotros hemos perdido hace mucho tiempo la esencia”.
En ese sentido opinó: “Hay una serie de acontecimientos nacionales que no ayudan, la nueva centralidad de la ex presidenta Cristina Fernández, no ayuda a un entendimiento que los partidos y el país necesitan, que es un entendimiento final entre el justicialismo y el radicalismo”.
Asimismo, analizó que “a la Argentina le está faltando que los principales partidos políticos vuelvan a ocupar el lugar que tienen que ocupar en una democracia. Se da un proceso con la presencia de las redes sociales y este lenguaje corto y soez que los dirigentes políticos bajan a la sociedad que conspira contra la estructura democrática”.
En esa línea, sostuvo que esa presencia fuerte de los partidos se fue diluyendo y que “hay una estructura partidaria nueva, como el PRO, que va en camino rápido hacia su desaparición”. También comprendió que la UCR va en una dirección similar y que los comités barriales pueden ayudar a dilatar su desaparición si se encuentra una salida.
“Pero la realidad es que no se propone nada nuevo, no hay un proyecto económico y social que le podamos proponer a la sociedad y decirles por acá”, lamentó Ruiz Deza.
Por otro lado, en relación al vínculo del peronismo con el radicalismo, remarcó que “uno puede tener enemigos o adversarios, con aquel que piensa diametralmente distinto. Pero es una zoncera hoy pensar que dos partidos que tienen prácticamente la misma doctrina y las mismas ideas estemos confrontando por situaciones personales. Eso es lo que me apena”.
Y agregó que, frente a proyectos como el que encarna Javier Milei, “que salió de la nada misma por errores nuestros, estos nuevos fenómenos que pasan a nivel mundial, no solo en Argentina, lo que se le deberían anteponer son estructuras fuertes, que requieren consenso”.
Así es que lamentó que “no hay, en ninguna de las dos estructuras viejas de la Argentina, liderazgos que entiendan que no se puede seguir peleando. Hay que buscar un proyecto nacional, ponerlo arriba de la mesa y ejecutarlo en conjunto”.
En otro orden, Ruiz Deza se refirió a la situación del partido radical ante estas elecciones legislativas y mencionó que “está explorando una alianza con los sectores que no están ni de un lado ni del otro de la grieta, pero no le veo sinceramente mucho futuro a eso”.
Siguiendo con lo anterior cuestionó la postura de Axel Kicillof: “Esperaba otra valentía por parte del gobernador. Me parece que no tiene la decisión que se requiere en estos casos”.
También se refirió a CFK: “Tienen ese problema de contar con una dirigente con mucha fuerza todavía, que puede ganar un 30% de amores, pero es todo lo que tienen. Se quiere poner en un lugar como si fuera Juan Domingo Perón y está a años luz, no va a lograr nunca tener el 60% del pueblo como tuvo el general Perón en 1973”.
“Es un problema para el justicialismo, en la medida que no renueve esa centralidad con un dirigente que esté dispuesto a enfrentar y producir una renovación, es muy complicado”, finalizó.