Reelecciones indefinidas de legisladores y concejales: Escenario complejo en Diputados

Luego de la ajustada votación en el Senado bonaerense, que implicó el desempate de la vicegobernadora Verónica Magario, la iniciativa cristinista de reelecciones indefinidas para legisladores y concejales encontrará en Diputados un escenario complejo para su conversión en ley.

Por un lado, el peso del massismo dentro de la composición del bloque de Unión por la Patria despunta mayor músculo político que en el Senado, donde solamente tiene una representante, Sofía Vannelli, que rechazó el proyecto del kirchnerismo duro.

En la Cámara baja, el Frente Renovador ostenta nueve legisladores, casi un tercio del total de la bancada que maneja el camporista Facundo Tignanelli.

Si estos diputados repiten el accionar de la senadora Vannelli, el oficialismo quedaría menguado a 28 apoyos de los 46 que debería recolectar si es que la propuesta suma despacho de comisión como se prevé.

Tampoco habría que contar como activo a la diputada del espacio de Juan Grabois, Lucía Klug, quien emularía la actitud de Federico Fagioli que se ausentó del debate en el Senado.

Desde el bloque de Unión, Renovación y Fe las opiniones están dividas, se especula en el poroteo inicial que cinco legisladores acompañarían la propuesta cristinita pero el resto de los nueve diputados se abstendrían o directamente votarían en contra.

El oficialismo debería buscar nuevos apoyos en el bloque que los radicales disidentes comparten con el GEN donde no parecen muy predispuestos a acompañar la iniciativa, sobre todo ahora que temporalmente actúan en tándem nuevamente con el abadismo.

El bloque mileísta no acompañará la movida cristinista como así tampoco lo hará la UCR oficial, que conduce Diego Garciarena, y sus ex socios políticos del PRO, con el ritondista Matías Ranzini a la cabeza.

La Coalición Cívica con sus tres legisladores ya ha manifestado públicamente su rechazo a las reelecciones indefinidas al igual que los dos diputados del interbloque de Izquierda Unida.

Así las cosas, la situación no aparece a priori tan apacible para el oficialismo por lo que el escenario ajustado de votación del Senado vuelve a sobrevolar sobre el ámbito de la Cámara baja.

La propuesta seguramente será tratada lo antes posible en la comisión de Legislación General, que preside el massista Rubén Eslaiman, y se presume que si obtiene despacho, podría ingresar al Orden del Día en la próxima sesión en Diputados. Algunos ya avizoran como fecha estimativa la próxima semana, tomando en consideración que el próximo 19 de julio vence el plazo para la presentación de las candidaturas para la elección del 7 de septiembre.

Endeudamiento en el Senado

Luego del despacho positivo en la comisión de Presupuesto e impuestos del Senado que obtuvo el expediente del Ejecutivo que solicita autorización para endeudarse por 1045 millones de dólares y para emitir Letras del Tesoro por 250 millones de dólares, la propuesta quedó habilitada para su tratamiento en el recinto.

Ergo, antes debe transitarse una etapa sinuosa de negociación que el Ejecutivo debe activar con los bloques opositores, sobre todo con el abadismo y el PRO en lo que tiene que ver con el dinero para el fondo que se asignará a los intendentes.

La propuesta señala que se destinará el 8% del total de deuda tomada, mientras que  alcaldes amarillos y centenarios reclaman que el piso se eleve a por lo menso el 15%.

De igual modo, los bloques opositores están solicitando que se abra la discusión por los puestos vacantes en los organismos del Estado que corresponden a la oposición, como así también se incluyan en la discusión los cuatro lugares a llenar en la Suprema Corte de Justicia y los sillones en el Directorio del Banco Provincia.

No obstante, el Ejecutivo tuvo un gesto para con los intendentes ya que accedió a modificar un aspecto sustancial del proyecto.  En la letra original el expediente prorrogaba hasta el 31 de diciembre de 2025 la devolución de los fondos que la provincia asignó a las municipalidades durante la pandemia de Covid y luego para abonar la suma fija dispuesta por Massa en 2023: el gobierno de Kicillof ahora cancela definitivamente esa deuda.

La jugada del Ejecutivo también desactiva la movida camporista en Diputados, donde un proyecto de ley del diputado Juan de Jesús que apunta en esa dirección ya estaba pronto para aprobarse en la próxima sesión.

El oficialismo debe acordar irremediablemente con la oposición en el Senado ya que el proyecto del Ejecutivo necesita los dos tercios de los votos al tratarse de un endeudamiento: ergo, son 31 los apoyos que tendrá que contabilizar.

El juego está abierto y se mensura que la semana entrante la Cámara alta podría convocar nuevamente a sus miembros para intentar colar en el debate este expediente, ya que en la sesión de este pasado miércoles los senadores de la oposición se abroquelaron en Labor Parlamentaria y bloquearon la inclusión del proyecto en el temario.